El ministerio contrata a ocho trabajadores para evitar el cierre de salas en el Museo de Cerámica

«La apertura de todas las salas del Museo Nacional de Cerámica está garantizada durante el verano gracias a la contratación temporal de ocho nuevos trabajadores». Contundente. Es la respuesta que ofrece el Ministerio de Cultura a LAS PROVINCIAS cuando le pregunta si este verano quedarán cubiertos los puestos del espacio museístico valenciano que desde hace más de un año se ha visto obligado a cerrar salas por falta de personal impidiendo así la visita completa a uno de los museos más solicitados por propios y extraños de la ciudad de Valencia. Contar con los trabajadores necesarios es imprescindible para acabar con la agónica situación que arrastra un espacio cultural que este año conmemora su 75 aniversario.

Al mismo tiempo que el Ministerio de Cultura realiza este anuncio, el propio museo mantiene en su espacio en internet la advertencia de que «algunas salas de la exposición permanente (sección de cerámica) y las salas de exposiciones temporales podrían estar cerradas al público por motivos de falta de personal de vigilancia. Disculpen las molestias». A juzgar por la información que facilita el departamento del gobierno que gestiona Miquel Iceta, es previsible que esta indicación desaparezca en breve. Pero ese día aún no ha llegado para un edificio donde nunca sorprende encontrarse con el bello patio de acceso repleto de turistas dispuestos a recorrer las estancias museísticas del Palacio del Marqués de Dos Aguas. Es uno de los espacios culturales más visitados de la ciudad. Sólo hasta marzo cerca de 30.000 personas (28.931) han pasado por sus salas. Pero en los últimos meses -más de un año- el atractivo edificio de Poeta Querol no ha podido mostrarse en su totalidad.

En medio de este asunto, se escucha la voz de los sindicatos. Los representantes de los trabajadores, a mediados del pasado mayo alcanzaron un acuerdo con el ministerio que flexibilizaba las exigencias de titulación para el acceso a los puestos de vigilantes y encargados de sala. Ahora Ezequiel Archilla -presidente del área de Administración del Estado de CSIF en la Comunitat Valenciana- a preguntas de este periódico sobre el anuncio del Gobierno de España de la contratación de ocho personas para este verano, asegura que si bien le «alegra la noticia», de momento «no nos han llamado para designar a los compañeros que formarán el órgano de selección del personal». Archilla asegura que este paso es necesario para la designación de los trabajadores, también en el caso de que sean temporales y advierte de que sí se les llamó para «designar un puesto de guía, pero no para los vigilantes de sala». A día de hoy, recalca, «no tenemos constancia», si bien asegura que «incluso podrían llamarnos el 30 de junio».

La decisión que el ministerio, titular del Museo Nacional de Cerámica, asegura que ha adoptado, no es la definitiva. Habla el departamento gubernamental de «contratación temporal». Es una medida para salvar el verano: «Se han puesto en marcha y gestionado todas las contrataciones de personal temporal necesario para estos meses», advierten. Otra cosa distinta será disponer del personal definitiva. Habrá que seguir esperando, pues aseguran que «la cobertura de puestos de personal definitivo se realizará mediante la Oferta de Empleo Público de 2020, que incluirá plazas de personal de vigilancia y cuyo proceso selectivo comenzará en los próximos meses».

El cierre de estancias por falta de personal, situación que también sufren otros museos estatales como la Casa Museo Sorolla o el Museo del Romanticismo en Madrid, no es la única muestra de indiferencia que el Gobierno lleva mostrando al espacio valenciano. Al cierre de salas se añade el enquistado olvido por parte del Ministerio de Cultura de la ampliación que requiere el edificio y que se reclama desde 1999. Buena parte de la rica colección que posee la propuesta museística que alberga el Palacio del Marqués de Dos Aguas, se encuentra guardada en almacenes, sin que el público valenciano y foráneo, pueda disfrutar de su contemplación. No hay salas suficientes, y sí suelo disponible para hacer realidad el ansiado y reivindicado proyecto.

El Museo Nacional de Cerámica y Artes Suntuarias celebra este año el 75 aniversario de su fundación, que tuvo lugar el 7 de febrero de 1947 con el acto de donación de la colección de cerámica de Manuel González Martí al Estado. La efeméride coincide con los 50 años de la muerte del fundador, acaecida el 4 de enero de 1972. La sede del Museo Nacional de Cerámica se estableció, algunos años más tarde de su fundación, el 18 de junio de 1954, en el Palacio del Marqués de Dos Aguas.