Los festivales de música tratan de aprender de sus errores

Tampoco ayudaron las diversas denuncias por impedir la entrada de comida y bebida a los recintos de estos festivales y la advertencia de las asociaciones de consumidores al asegurar que este hecho era ilegal. Fueron sucesos que marcaron un camino a seguir, el de subsanar errores y mejorar aspectos relacionados con la seguridad de los espacios, el regreso del importe de las entradas, la sostenibilidad de este tipo de citas musicales e, incluso, con la mejora de otros aspectos para hacer más agradable y evitar cualquier tipo de incidente o denuncia en la experiencia de los amantes de la música.

¿Se ha aprendido de lo que pasó? Los promotores insisten a este diario que lo ocurrido en 2022 son casos puntuales, que no deberían oscurecer que la Comunitat es tierra de grandes festivales. El desafío pasa por que estas cosas no vuelvan a ocurrir. «Se han ampliado los seguros por todo el tema de seguridad, de la devolución de las entradas. También se están endureciendo las condiciones de los ayuntamientos y estamos teniendo muchas reuniones para cumplir los requisitos que se imponen en materia de seguridad. Algo que, además, amplía la burocracia, pero los festivales son entornos seguros», afirma Víctor Pérez, portavoz de PromFest (Asociación para la Promoción de Ciclos, Conciertos y Festivales de la Comunitat Valenciana). En su opinión, «los consistorios piden cada vez más requisitos. Algo que está bien pero deberían ayudar y, sobre todo, asesorar», asevera. Además, señala que los recintos están comenzando a contar con cámaras de videovigilancia y grabación.

Desde el SanSan, su director artístico, Germán Quimasó, da las claves de cómo afrontan la actual edición. Asegura que, en el caso de esta gran cita musical, este año no difiere de ejercicios anteriores. Ya que, preguntado si se han ampliado las medidas de seguridad tras lo ocurrido en el Medusa, sostiene que en 2019, el SanSan se suspendió por las inclemencias del tiempo. «Nosotros lo mantenemos todo igual aunque es cierto que este año se mira todo con lupa. Hay muchos festivales que no le daban a la seguridad la verdadera importancia. No digo que hagan mal las cosas, pero no tenían muy claro cómo reaccionar ante posibles incidentes o empeoramiento de las condiciones meteorológicas», señala.

El SanSan ha mantenido un seguro que puede contratar el usuario, y que por primera vez pusieron en marcha en 2022, con el que el público, ante cualquier impedimento para poder acudir al festival, puede recuperar el importe de las entradas o abonos. «Es algo que pusimos en funcionamiento por la pandemia y se ha quedado», relata.

En este sentido, y ante algunas de las acusaciones de precariedad y bajos salarios que algunos técnicos y músicos plantearon el año pasado, los promotores coinciden en que las condiciones laborales están sujetas por convenios y animan a los empleados a que sí sufren algún tipo de problema, denuncien. «Todos nuestros trabajadores están dados de alta en la Seguridad Social, nadie trabaja sin contrato», dicen desde el SanSan.

Por otra parte, LAS PROVINCIAS se ha puesto en contacto con los organizadores del Medusa Sunbeach para conocer cómo afrontan la edición de 2023 tras el accidente del verano pasado. Sus responsables han declinado contestar cualquier pregunta relacionada con las posibles mejoras o cambios que van a realizar en esta nueva edición.

En lo referente a la sostenibilidad ecológica de estas citas, los promotores insisten en que en los últimos años han puesto en marcha medidas para intentar contaminar lo menos posible. Desde PromFest argumentan que aspectos como el cableado, medir la huella de carbono o intentar reducir el consumo de plásticos se están aplicando en los grandes festivales. Quimasó relata que este año, el SanSan ha instalado bidones de agua para que tanto el personal técnico como los artistas y sus equipos no consuman botellas. «También hay fuentes de agua del grifo para el público», comenta.

El SanSan abre este jueves la temporada de grandes festivales de la Comunitat Valenciana. Durante tres días, por Benicàssim pasarán artistas como Love of Lesbian, Zahara, Guitarricadelafuente, Dorian, Lori Meyers, Leiva o Alizzz, entre otros. Con unas previsiones de 45.000 personas, el certamen ha colgado el cartel de todo vendido. Es el primero, pero después llegarán desde los ya asentados FIB (del 13 al 16 de julio) y Rototom Sunsplash (del 16 al 22 de agosto), ambos en Benicàssim, al Festival de Les Arts (9 y 10 de junio en la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia), el Arenal Sound (del 1 al 6 de agosto en Burriana), el Low (entre el 28 y el 30 de julio en Benidorm), el Zevra Festival (del 21 al 24 de julio en Cullera) o el Big Sound (del 29 de junio al 1 de julio en la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia)

El Medusa Sunbeach mantiene la celebración de su edición de 2023 y hace unos meses, cuando faltaba medio año para su celebración -tendrá lugar entre el 9 y el 14 de agosto- ya se habían vendido 30.000 entradas para la cita (cuyo cabeza de cartel es el 'dj' David Guetta).