El nuevo Consell de Disseny echa a andar

Se inicia ahora una nueva etapa cuyo objetivo es la desarticulación del modelo anterior implantado por el Gobierno de Rialto. En esta primera cita, se incorporan por primera vez la ilustradora Virginia Lorente, el arquitecto Javier Domínguez y la diseñadora Inma Bermúdez. El resto de incorporaciones son: Javier Lacasa, Rafael Armero, Francisco Ballester Borrell, Javier Domínguez Rodrigo, Manuel Martínez Toral, Javier Colomer Ramos, Melanie Lleonart Garcia y Pedro Sáez Martínez.

Coincidirán así con los veteranos Silvana Andrés Salvador, Carmen Baselga Fuster, Inés Novella Abril, Kike Correcher González, Marisa Gallén Jaime, Xavier Giner Ponce, Yolanda Pérez Herraiz, Maite Palomares Figueres, Irene Reig Alberola y Ana Segovia Ciudad Real.

«Hoy ha sido una primera toma de contacto para ver cómo va a funcionar ahora el Consell del Disseny, si por comisiones, temáticas generales o proyectos concretos», cuenta el concejal de Cultura, y añade que la inmensa mayoría de los miembros han asistido de forma presencial, tres telemáticamente y solo uno o dos no han podido asistir de ninguna manera. «Nos volveremos a reunir en septiembre ya con un orden del día y con proyectos concretos, posiblemente la primera quincena, pero está aún por concretar», concluye.

Este órgano consultivo nació hace dos años durante el gobierno del exalcalde Joan Ribó gracias al nombramiento de Valencia como Capital Mundial del Diseño en 2022, y se trata del primer consejo de diseño de un ayuntamiento en España. No obstante, sus funciones quedaron paralizadas desde abril de 2023 debido al cambio de gobierno tras la victoria de Catalá en las pasadas elecciones municipales.

De primeras, la modificación más llamativa es que los miembros dejarán de cobrar por el ejercicio de sus funciones. Se establece así una distinción respecto al período anterior, donde estos recibían dietas de 150 euros por la asistencia a reuniones. Sin embargo, se abonarán los gastos por desplazamiento, alojamiento y manutención a los integrantes que residan fuera de la ciudad y deban desplazarse a reuniones presenciales.

El nuevo órgano consultivo se encargará, además de redefinir a nivel creativo y conceptual la idea de ciudad, de detectar los problemas de diseño y comunicación estratégica, del asesoramiento a los servicios municipales o la implementación de acciones relacionadas con el diseño como la inclusividad y la sostenibilidad. Promover la participación ciudadana será otro de los puntos clave.

Finalmente, los acuerdos adoptados por el Consell de Disseny tendrán carácter de recomendaciones no vinculantes.