Los trabajadores temporales de dos emblemas culturales de la Comunitat, el Museo de Bellas Artes de Valencia y el Consorcio de Museos han puesto de relieve este viernes que «la gestión cultural de la Generalitat en la última década ha perpetuado la situación de precariedad que aqueja a los museos valencianos, con plantillas insuficientes y un altísimo índice de temporalidad».
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Así se han referido en un comunicado en el que los trabajadores «reclaman a la Conselleria su inclusión en el proceso de estabilización que establece la Ley de reducción de la temporalidad en el empleo público» que, como resaltan, fue aprobada por el Pleno del Congreso de los Diputados.
Según el comunicado conjunto de ambas plantillas, la aprobación de esta legislación «afecta directamente a los trabajadores temporales de dos de los referentes culturales de la Comunitat Valenciana, que solicitan al conseller de Educación, Cultura y Deporte acogerse a la convocatoria única y de carácter excepcional que prevé la Ley para aquellas plazas de carácter estructural que hubieran estado ocupadas con carácter temporal de forma ininterrumpida con anterioridad al 1 de enero de 2016».
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Los trabajadores sostienen que «la gestión cultural de la Generalitat en la última década ha perpetuado la situación de precariedad que aqueja a los museos valencianos, con plantillas insuficientes y un altísimo índice de temporalidad». Y continúan: «el Museo de Bellas Artes de Valencia posee una de las colecciones de arte más significativas de España mientras que en su reducido equipo parte de la plantilla se compone por interinos en situación de abuso de poder».
Además, también ponen de relieve que «la exigua plantilla del Consorcio de Museos« está »compuesta prácticamente en su totalidad por laborales temporales en situación de inestabilidad desde hace más de 15 años« para »un organismo que se ha convertido en un símbolo de la política cultural del actual gobierno valenciano«.
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«La actividad que el Consorcio desarrolla como vertebrador de la oferta expositiva y como artífice de la transformación del Centro del Carmen en un gran contenedor de cultura contemporánea, cuya actividad se ha multiplicado y diversificado de manera notable, se sostiene con el trabajo de una plantilla de ocho laborales temporales», denuncian antes de solicitar «cumplir con el sentido de la ley impulsada y aprobada por los partidos políticos que conforman el gobierno valenciano y de acuerdo con la Proposición de Ley (622/000067) presentada por el senador perteneciente al partido Compromís Carles Mulet García».
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