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La cultura valenciana vuelve a salir desairada de los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Sólo el IVAM ve como la dotación del Gobierno central crece de cara al próximo año. El Instituto Valenciano de Arte Moderno tiene consignados para sus gastos de funcionamiento 400.000 euros, frente a los 261.000 del año pasado. Una cifra que contrasta con los más de 1,1 millones de euros que reciben instituciones como el Museo de Arte Contemporáneo de Cataluña (MACBA) o el Museo Nacional de Arte de Cataluña, con 2,1 millones.
En el Palau de les Arts, por su parte, y aunque ve cómo recibirá un millón de euros frente a los 895.000 aprobados del ejercicio anterior, cabe destacar que en los PGE de 2019, prorrogados posteriormente, ya se contemplaba una partida de esta cuantía tras una enmienda que aprobó ascender el presupuesto hasta el millón, pero la partida no llegó a ejecutarse en su totalidad. Ahora, según las cuentas, obtendrá un millón de euros. Pero el coliseo de ópera también siente el desagravio en comparación con otros auditorios de España. Les Arts se sitúa muy lejos de los 12,1 millones del Teatro Real o el Liceu de Barcelona, que recibe 7,1 millones y una aportación extraordinaria de 1,9 para necesidades de tesorería. También dispone de más dinero el Teatro de la Maestranza, que ingresará 2,5 millones de euros.
Por lo que respecta a los museos de titularidad estatal, como ya sucediera el año pasado, aparece una partida de 50.000 euros destinada a la mejora del entorno y accesos al Museo de Bellas Artes de Valencia. Sin embargo, las cuentas estatales contemplan el futuro plan museográfico del Bellas Artes, cuya dotación total se estima en 2.750.000 euros (con una proyección de inversión de dos millones para 2023 y 700.000 euros para 2024). El esperado plan del San Pío V, valorado en 2,8 millones de euros, se queda con estos 50.000 euros para 2022 y relega el grueso a 2023.
Asimismo, otro de los espacios estatales, el Museo Nacional de Cerámica y Artes Suntuarias González Martí de Valencia contempla una partida de 100.000 euros para 2022; de 250.000 en 2023, de 210.000 en 2024 y dos millones para 2025. Su ampliación, por tanto, esperará hasta ese año. El ejercicio anterior tenía consignada la misma cantidad y lo correspondiente a 2022 se debe a la mejora de la climatización.
Finalmente, en Castellón, destaca la nueva sede del Archivo Histórico de Castelló, con una previsión de 3 millones en las cuentas del próximo ejercicio. En el caso de la Alicante, la construcción de la nueva sede de la Biblioteca Pública con un millón.
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