Rótulos que ponen nombre a la nueva cultura en Valencia

Las nuevas letras rebautizadas como logos llegan casi todas de la mano de diseñadores del siglo XXI para compartir espacio con letreros de otros tiempos –los que van quedando– que realizaron los «rotuladores», apunta el diseñador Juan Nava. También la manera de trazarlos y el estilo se adapta a los tiempos. Los medios digitales han tomado el relevo a las letras pintadas por rotuladores sobre soportes bien distintos a los actuales. Aun así, Nava señala que en estos momentos «hay jóvenes rotuladores en Valencia», otra muestra de convivencia: medios y formas de hacer de hoy comparten el espacio y el tiempo de la era digital.

Sin embargo a juicio de las voces expertas consultadas por LAS PROVINCIAS no parece que exista un estilo propio de Valencia. Tampoco se afirman tendencias o modas. Miguel Maestro, diseñador, considera que los letreros no siempre son una apuesta fuerte de los espacios, y habla de que se tiende a escoger elementos gráficos que respondan a conceptos «globales, a llegar a públicos amplios» para la búsqueda del «diálogo social» entre los letreros y las calles. Minimalismo, con escaso adorno es a la vista lo que parece ganar espacio.

En rojo sobre fondo blanco abre el diálogo con Valencia el rótulo del Centro de Arte Hortensia Herrero de la calle del Mar. Letras limpias y curvas evocan de uno de los elementos arquitectónicos del histórico edificio e invitan a preguntarse ¿qué cuentan? «Es un diseño de la agencia creativa 'After'. Lo componen cinco ventanas, las que se pueden apreciar en el tercer piso del edificio», apuntan desde la Fundación Hortensia Herrero. «Es un logo con el simbolismo, además, de abrir la ventana, en este caso, la de una nueva ventana al arte contemporáneo», añaden.

Hay forma y hay concepto como sucede en la galería In Arte Veritas que abrió sus puertas en la calle Cirilo Amorós en febrero de 2023. Sus letras responden a «una tipografía que simula el trazo realizado con un pincel, como si lo hubiera escrito un artista», expone Stéphane Debost, propietario de esta galería y de otras dos en Francia, que comparten logotipo. ¿Qué buscaban? «Una imagen que simbolizara a la vez pasión y dinamismo y que fuera poco formal, juvenil».

Contemplar uno de estos elementos urbanos obliga también a mirar la armonización con el entorno, el trabajo creativo se tiene que conjugar con el espacio que lo rodea en beneficio de la estética, como se desprende de la observación de Stéphane Debost cuando afirma que al colocar los letreros en vertical entre las ventanas «hemos buscado que sean elegantes y que dialoguen perfectamente con el edificio, que tiene una fachada espectacular» del Ensanche de la ciudad.

También el Ayuntamiento de Valencia incluyó nuevo rótulo en el acceso al Museo Histórico en la reforma que presentó en noviembre de 2023. Sencillez de líneas sobre blanco, un letrero que habla de un universo aséptico de titularidad pública.

Centro Histórico y Ensanche hasta este punto del recorrido, pero no sólo en estos territorios se asienta la creatividad artística que cuelga de las paredes en forma de rótulo para los nuevos espacios culturales. Las letras se expanden por los barrios al mismo ritmo que los nuevos espacios culturales los conquistan.

La librería y espacio cultural Vuelo de Palabras colgó su letrero en la Avenida de Giorgeta en octubre de 2023. Un globo aerostático de color naranja de trazado muy fino advierte de que en ese lugar «se da vuelo a las palabras», señala Toni Alcolea, editor y propietario del espacio. Un diseño de hoy obra de Román García, pero con el alma «romántica» que trasluce el globo, ofrecen la combinación creativa que buscaba el propietario de la casa para presentarse.

Y en el mismo barrio, el de Jesús, también la música se ha aliado con nuevas aportaciones estéticas al espacio urbano. En el número 91 de esta calle, un luminoso blanco con letras negras avisa de que allí está HIFI. Lo ha diseñado Ausiàs Pérez por encargo de los responsables del espacio The Basement. Carlos Aladí explica que a la hora de concebir el espacio al «rótulo le hemos dado mucha importancia. De hecho, es el único elemento que muestra la fachada, que es muy austera» y se presenta como elemento que concede valor. Una vez más surge la búsqueda de armonía en el poder artístico de los rótulos en tanto que descubren fuentes creativas variadas que discurren por corrientes estéticas diversas que se confirman en Llano de Zaidía ante la nueva la librería Nöstlinger, apuesta de María García.

Ella misma ha dibujado el logo del establecimiento, el que muestra en la fachada. Aquí a creatividad optó por el diseño digital propio, circunstancia que aporta otro dato a la diversidad que acompaña a la creatividad con la que ha querido transmitir el amor por los libros «con la cara de una niña y el nombre de una autora que me gustaba mucho». Una concentración de haceres culturales.

En la calle de La Mascota, en Arrancapins, el Mercado de la Imprenta abre bajo letras de trazo fino combinadas con curvas que hablan de puertas abiertas acompañadas de una palmera. Es un letrero fruto de la creatividad actual para un espacio en el que los rótulos adquieren gran protagonismo. El interior de la que fue Imprenta Vila ofrece un amplio muestrario de letras de otros tiempos, retrato de la convivencia y el diálogo del que hablan los especialistas. El rótulo se mantiene vivo en los nuevos espacios culturales.