La compositora valenciana que ha puesto música a 'Los Simpson' y 'Star Wars'

–¿Qué supone el premio europeo que acaba de ganar?

–Es un reconocimiento al trabajo de las compositoras, a la figura de la mujer. Más que un premio para mí, que sí lo es, con estas iniciativas se pone en valor nuestro trabajo y se visibiliza la figura de la mujer en el mundo de la composición, que parece que no, pero sigue un poco olvidada.

–Sara Galiana procede del universo de las bandas de música valencianas, concretamente de la de Benimaclet, ¿estas formaciones tradicionalmente parece que sí que han concedido espacio a las mujeres, o no el que deberían?

–Tienen muchas iniciativas y en este sentido a las bandas las veo más progresistas que a las orquestas, que son de corte más clásico y conservador. Las bandas se abren a los nuevos autores, buscan obras para estrenar y esto incluye repertorio de mujeres. Además, tienen iniciativas que tratan de incentivar que la mujer componga para estas formaciones, que también es difícil porque el mundo de las bandas no está muy extendido.

–A los valencianos nos resulta muy familiar, ¿pero más allá?

–Sales de Valencia y ves que en España está poco extendido y cuando sales de España ya te das cuenta de que es nacional más que nada.

–¿Cómo es trabajar con Barbra Streisand?

–Estuve con una empresa que trabajaba para cantantes muy conocidos como el caso de Barbra Streisand. No traté directamente con ella, pero sé que es una persona muy exigente. Al final siempre trabajas con la presión de que todo esté a su gusto, pero era un trabajo más que había que cumplir como los demás que estaban en la agenda, cubríamos muchos proyectos a lo largo del mes. Era uno más.

–¿Y trabajar con 'Los Simpsons' cómo es?

–Lo mismo. Teníamos muchas series, 'Los Simpsons', 'Padre de familia' y otras. Además, son series que cada día graban un episodio, siempre había faena. Al final del día era cuestión de ir haciendo los proyectos que iban entrando y no le dabas más vueltas. La cuestión es trabajar, entrar en la rueda e ir haciendo.

–Ahora está en Valencia, ¿se va a quedar o piensa en otro destino?

–De momento estoy en Valencia, pero tengo la mirada puesta en volverme a ir. En España, el trabajo es escaso y viene a cuentagotas. Por muy bien que lo hagas y te muevas, el trabajo es finito y no hay más que eso. Además, los presupuestos no son los mismos que fuera y al final tienes que elegir si quieres progresar en tu carrera o quedarte y tratar de sobrevivir complementando con otros trabajos como enseñar en el Conservatorio.

–¿En la Comunitat Valenciana cómo ve la situación para los compositores, es necesario salir para poder abrirse camino?

–Si quieres vivir como compositor de cine, es un rotundo sí a salir de aquí. Por mucho que te muevas necesitas un impulso extra que tal vez puedes encontrar fuera. Es una pena. Pero este país tiene los recursos que tiene, son limitados y al final si uno quiere desarrollarse más, pues ya sabe que hay que irse.

–¿A lo que quiere dedicarse es a la música para el cine?

–Sí, al cine y a los videojuegos.

–¿Esos campos tienen más proyección que otros en Valencia y en España?

–En España he trabajado con productoras grandes, digamos 'top', pero comparando las de España con las mismas productoras fuera, no tienen nada que ver en cuanto a tiempos, presupuesto y organización, y claro en cuanto a cantidad de trabajo. Es completamente diferente.

–¿Para qué director de cine le gustaría componer una banda sonora?

–Pues, ¡madre mía! Me pillas. Si pudiera trabajar con Steven Spielberg estaría encantadísima. Pero poniendo los pies en la tierra, me gustaría trabajar con un director con el que me lleve bien. Al final los mejores productos son consecuencia de buenas relaciones. Observo que cuanto mejor me llevo con el director, mejor es el producto que conseguimos. Será porque nos entendemos más o porque el trabajo fluye mejor. Al final, es así.

–Ya que procede de una banda, ¿qué significado tienen estas formaciones para quienes se quieren dedicar profesionalmente a la música?

–Las bandas son un elemento muy importante al inicio de la formación porque permite socializar, reunir a un grupo de gente con los mismos gustos e inquietudes que tú para hacer, encima, música. Por eso creo que es tan importante mantenerlas. Ayudan a la sociedad a ser más social e inclusiva. Luego si quieres desarrollarte más a fondo, hay que volar a los conservatorios o fuera. Pero para iniciarse en la música son muy importantes.