El secreto oculto del Museo Miquel Navarro

Cuenta el escultor Miquel Navarro que cuando llegó hace ahora casi treinta años al inmueble que convirtió en su estudio de trabajo en su localidad natal, Mislata, no tenía ni idea de los secretos que ocultaba el taller, que anteriormente había sido un almacén de droguería. Fue cuando, pasado un tiempo, el suelo se venció por el peso de una máquina y descubrió que bajo lo que está llamado a ser el Museo Miquel Navarro (que pretende abrir el próximo año) se encontraba un refugio de la Guerra Civil más de 300 metros cuadrados y tres alturas (con entre diez y doce metros de profundidad). Tras el hallazgo, el conocido artista se encargó de adecentar el laberíntico enclave que se cree que tiene una salida a la calle. Navarro instaló bombillas para iluminarlo, construyó unas escaleras para que su acceso se hiciera de forma segura y lo ha mantenido todos estos años, relata el escultor a LAS PROVINCIAS, «para que se mantuviera».

Ahora, y gracias al centro cultural que la recientemente creada fundación que lleva su nombre va a impulsar próximamente, ese curioso refugio de la Guerra Civil (aunque se va a estudiar su origen concreto) va a ser accesible al público. «La intención es realizar un estudio del espacio, reformarlo y que sea visitable por el público del nuevo museo», relata a su vez el alcalde de la localidad de Mislata, Carlos Fernández Bielsa.

Se cree, además, que en esa maraña de pasillos, construidos directamente en el subsuelo, que bajan casi doce metros de profundidad, tendría también salida a la calle. Dentro de los trabajos para adecuar el futuro centro cultural se encuentra el de adecentar el espacio y conocer su origen y documentar si el refugio bajo el taller de Miquel Navarro, que está situado en pleno centro histórico del municipio, podría ser más grande de lo que se conoce.

«Va a ser un atractivo más para el estudio, que se convertirá en museo próximamente. A finales del mayo se firmará el convenio con la Diputación de Valencia para iniciar el proyecto de reforma del taller», narra el primer edil. Tal y como adelantó este diario, la previsión es que después de verano se inicien los trabajos para habilitar el estudio y convertirlo en un centro cultural que no sólo sirva para acoger las más de 500 obras que Navarro ha cedido a la institución encargada de velar por su legado artístico, sino también para abrir sus puertas a las propuestas de otros creadores, tanto del mundo de las artes como de otros sectores de la cultura.

Y en esas obras para reparar la fachada, construir baños, instalar un ascensor y adecuar el edificio a las necesidades de un museo se encuentra la de descubrir al público el secreto oculto bajo el arte de Miquel Navarro: la de ese refugio que el creador ha salvaguardado del paso del tiempo.

Como se aprecia en las imágenes, el espacio subterráneo está excavado en la piedra. Como narra el alcalde, se pueden apreciar diversas capas de sedimentos, por lo que se contará con un equipo de expertos para estudien el origen del enclave. Dividido en tres alturas, la primera es la más pequeña y es en la que Navarro ha invertido más cuidado ya que ha reforzado su techo y paredes y lo ha utilizado como almacén. Es más, en la visita realizada por este periódico se podía apreciar, incluso, alguna creación con el inconfundible sello de Navarro.

En la actualidad, se están llevando a cabo todos los trámites administrativos y burocráticos para que a lo largo de los próximos meses, la Fundación Miquel Navarro comience su actividad. Se conoce, además, que el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, presidirá el patronato de la entidad, en la que estarán miembros del resto de administraciones públicas. La intención es que las obras se inicien en el último trimestre del año para que en 2022 la apertura del espacio pueda ser una realidad. Es más, en mayo se firmará el convenio con la Diputación de Valencia, que abonará los 300.000 euros que financiarán los trabajos.

La dimensión artística del genio de Mislata logró la complicidad de las instituciones públicas, entre ellas el Ministerio de Cultura, que acudió al acto de constitución de la institución el pasado mes de octubre y en el que el ministro, el valenciano José Manuel Rodríguez Uribes, mostró su apoyo al artista de Mislata. La formalización del acuerdo se realizó en el Palau de la Generalitat, sobre una mesa en la que se podía contemplar una obra de Navarro. Sobre ella se firmó el protocolo en el que se daba el pistoletazo de salida a una iniciativa que nace para conservar y proteger el legado de un valenciano universal, de uno de los artistas más reconocidos en el territorio internacional. La obra del escultor está presente en numerosos museos tanto españoles como de cualquier parte del mundo, y su trayectoria está jalonada de reconocimientos, entre los que se encuentra el Premio Nacional a las Artes Plásticas 1986.