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Era una noche para celebrar pero también para reivindicar. Las artes escénicas valencianas se reunieron en la noche de este lunes en los premios anuales que entrega la Asociación Valenciana de Empresas de Teatro y Circo (Avetid), que además cumple 30 años de vida, en una ceremonia en la Sala Off de la ciudad de Valencia para rendir tributo al sector de la Comunitat. El espacio se convirtió en una especie de cabaret festivo en el que cuatro bailarines dieron inicio a todo un homenaje al teatro y el musical. Después, dos actores interpretaron en forma cómica algunos pasajes muy reconocibles de la historia del teatro. Hubo hasta flamenco al son de una guitarra española con su baile incluido. Sin embargo, también fue una noche para hablar de la situación que atraviesa el sector. Precariedad, dignificación y políticas públicas fueron algunas de las palabras que más sonaron en la cita escénica de boca de los premiados.
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Porque tras la pandemia y ante un escenario incierto por la inflación, los costes de la energía, la guerra de Ucrania y el temor a que los ciudadanos dejen de consumir cultura, tocaba tomar cartas en el asunto. Fue la presidenta de Avetid, María Ángeles Fayos, la encargada de clamar por «la dignificación de las artes escénicas».
«Aquí se han hecho grandes esfuerzos, lo reconozco. Se han abierto itinerarios pero se han perdido caminos que se han convertido en atajos. Nosotros necesitamos unos tiempos que no son los de los políticos. La ayudas no pueden llegar tarde y mal. Sé que se hacen esfuerzos, pero necesitamos más. La gente no puede vivir de la pasión, esta profesión no puede ser siempre precaria. Somos millonarios en talento pero necesitamos apoyo y que se apoye a cada uno de una determinada manera», reiteró Fayos quien insistió en que «aún estamos lejos del 1% en cultura del presupuesto total de la Generalitat Valenciana y nuestros amigos de Cataluña ya piden el 3%».
La cita sirvió para galardonar a empresas, gestores, medios de comunicación y profesionales del sector que trabajan por defender las artes escénicas, en todas sus vertientes, que se desarrollan en la Comunitat. Así, el Premio Avetid de Honor fue a parar a la veterana actriz valenciana Empar Ferrer. Asimismo, el de Oro recayó en Produccions Scura, una empresa que se dedica al teatro de calle. Además, también se reconoció el trabajo del proyecto ¡A Quelar! de Extremus Danza y la Asociación La Calle Baila; a la Associació d'Actors i Actrius Professionals Valencians (AAPV); a la Fira de Teatre Breu La Ravalera; a Los Premios Buero de Teatro Joven; a la Revista cultural Verlanga; a la gestora cultural Encarna Dolz Sanchis; al actor, director y dramaturgo Roberto Hoyo; y al Concurso de Teatro Vila de Mislata.
Precisamente el representante de la AAPV pidió al sector «estar unidos para hacer más fuertes y demostrar que somos igual de importantes que otros sectores. O se hacen políticas que refuercen las artes escénicas, da igual de derechas o de izquierdas, o seguiremos igual. Hablamos de dignidad para borrar la palabra precariedad», afirmaron desde la entidad.
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Por su parte, la actriz Empar Ferrer recordó que comenzó en la profesión hace 50 años. «Tenía una vocación muy grande, pero no es nada si no tienes profesionalidad». «Esta noche, y no siempre ha sido así, me he sentido parte de la profesión teatral valenciana», aseveró emocionada. La cita del teatro valenciano, reivindicativa y festiva, terminó con confeti y una tarta.
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