Cuando la salud mental sube a escena

'Core' nació de Graners de Creació, una residencia artística para que jóvenes autores puedan escribir. Se estrenó en La Rambleta a finales de abril con notable éxito y ahora llega a Espai Inestable los próximos 3, 4 y 5 de mayo. «La idea de 'Core' sale de un momento muy convulso de mi vida. A mí me pasa mucho desde pequeña que necesito expresarme a través de la escritura. Los fragmentos que iba escribiendo no pensaba que fueran a ser una obra de teatro. Pero llegué a la conclusión de que quería juntar todo eso en una pieza de teatro», relata Cortés, que define su pieza como «autoficción». «En esta pieza yo no desvelo nunca si realmente lo que le pasa a esta persona es lo que me pasa a mí», cuenta.

¿Es, por tanto, una obra catárquica, que limpia el interior de la dramaturga? No tanto. «No, para mí la catarsis está en la vida y la escritura es el medio que utilizamos para hacerla un poco más trascendental», indica. Cortés ve la escritura como un juego, «poder liberarte de tu yo para volar hacia otros sitios». En esa travesía, 'Core' transita por el vídeo, por la danza, por la música, y también por el tiempo de la propia protagonista. Aparecen en escena la princesa Diana de Gales, sí, pero también santa Catalina de Siena o el Monstruo de las Galletas. 'Core' no es lineal, como tampoco lo es la relación de cada uno con su propio cuerpo, con su familia o con la percepción que tiene de sí mismo.

Porque es eso, el cuerpo casi como agente propio, el elemento central de la obra. También la culpa o la autoestima, aspectos que no son ajenos a nadie que viva en el siglo XXI, independientemente de la edad. «Es muy difícil poder desvincularnos del culto al cuerpo. Estamos en un punto crítico, sí, pero tenmos que aprender a aceptarnos a nosotros mismos», comenta Cortés, que añade que además de culto al cuerpo hay «culto a la juventud». «Puedes tener un cuerpo normativo pero el cuerpo cambia y hay un problema con normalizar y ensalzar los cuerpos adolescentes porque al final se cumplen años. Nunca vas a volver a tener el cuerpo que tenías con 20 años y eso lleva a problemas de salud mental», cuenta, y remata: «La aceptación es la base de todo pero hay que transitar un camino lleno de curvas».

Cortés es la capitana de un barco eminentemente femenino. El equipo de 'Core' está casi exclusivamente compuesto con mujeres, empezando por la compañera de tablas de Cortés, una experimentada Resu Belmonte, licenciada en arte dramático por el Institut del Teatre de Barcelona. La unión entre Cortés, que también ha estrenado ya dos obras, y Belmonte funciona a la perfección. «El año pasado me concedieron una Insula Dramataria en la que yo tenía que estar durante nueve meses escribiendo una pieza de teatro que se llamó La Fe. Esa pieza se estrenó en el Teatro Rialto de Valencia en noviembre del año pasado y tuve que buscar a los personajes. Y hubo uno en concreto que hizo Resu. Cuando la vi en escena me vino a la cabeza 'Core'», cuenta. «Nos entendemos muy bien», asegura Cortés.

La vida de 'Core' será larga, porque la obra girará este verano por Argentina, Chile y Uruguay, además de ciudades españolas como Logroño, Barcelona y Vitoria. ¿Y después?: «Me gustaría que la pieza llegara a institutos, creo que puede ser muy importante».