Urgente Un accidente múltiple provoca retenciones en la V-31 sentido Castellón
Eduardo Navarrete durante su participación en Maestros de la Costura RTVE

Eduardo Navarrete, desatado en 'Masterchef 11': «Entre lo caliente que está la patata y lo caliente que estoy yo...»

El diseñador alicantino ha vuelto a meterse entre los fogones del programa en la noche en la que Luca dice adiós

Diego Merino

Valencia

Martes, 6 de junio 2023

Este martes La 1 ha emitido una nueva gala de 'Masterchef 11' en la que como viene siendo habitual han acudido numerosos rostros conocidos de los fogones para tratar de aportar su granito de arena a los concursantes. Una de esas personas ha sido Eduardo Navarrete. El famoso diseñador alicantino ha tenido una presencia importante en una de las pruebas de esta noche en la que ha aportado su toque con el cuchillo y también con su labia.

Publicidad

«Vaya casting. Menudo casting habéis hecho este año. Son todos guapísimos. Entre Lluis y Eneko tengo el corazón partido como Alejandro Sanz». Así de espectacular ha sido la entrada de Navarrete en su regreso a 'MasterChef' tras su participación en 'Masterchef Celebrity 6', una edición en la que saltaron chispas entre el modisto y otros concursantes.

Si en su última presencia en los fogones de RTVE, Navarrete sorprendía con un look de Cupido tirando flechas a diestro y siniestro, en esta ocasión el flechazo se lo ha llevado él. Especialmente con Lluis con quien ha mantenido un flirteo constante a lo largo de la prueba de equipos. «Le veo algo como de Íñigo Onieva y como yo soy muy Tamara Falcó, me quedo con Lluis», afirmaba entre carcajadas.

Sin embargo, esa no sería la única decisión del diseñador a lo largo de la noche, puesto que tuvo que decidir quiénes serían los capitanes de cara a la prueba. Se decantó por Luca y el propio Lluis, sin saber que le tocaría cocinar con ellos. Y es que sorprendentemente le tocaría participar, según anunciaban Jordi Cruz y Pepe Rodríguez.

Navarrete comenzó ayudando al equipo azul, aunque su corazón pertenecía al conjunto rojo en el que se encontraba su amor platónico, Lluis. Y allá que fue raudo y veloz el diseñador a echarle una mano en cuanto pudo en un cocinado donde tuvo más ojos para los participantes que para las propias elaboraciones.

Publicidad

Eduardo se colocó junto a Eneko para cocinar las patatas y quiso conocer más al proyecto de chef. El exfutbolista le habló de su vida y de su matrimonio, algo que pilló por sorpresa a Navarrete. «¿Casado ya? ¿Pero qué edad tienes?», preguntó. Aunque rápidamente pasó a otro detalle: las canas.

Fue en ese instante cuando el valenciano lanzó una de sus frases mágicas: «Canas arriba. Ganas abajo». Eneko entró en el juego y aseguró que «ganas si que hay, desde que entré a MasterChef, nada de nada». Momento en el que subió la temperatura del cocinado y de los dos, a lo que el diseñador replicó con un: «Entre lo caliente que está la patata y lo caliente que estoy yo...».

Publicidad

Después de investigar sobre Eneko, llegó el momento para Lluis. Navarrete se acercó al capitán y le preguntó si tenía novia. Tras la respuesta afirmativa del aspirante, el diseñador siguió el juego asegurando que Lluis se parecía a Íñigo Onieva. Algo con lo que el aspirante intentó desviar la conversación, dándole las gracias por su trabajo y a lo que Navarrete no entró al trapo. «Me lo voy a cobrar. En carne trémula», volvía a insistir el artista.

La prueba finalmente la ganaría el equipo rojo entre los que se encontraban Pilu, quien fue la mejor de la prueba con un gran trabajo en su postre. Posteriormente, los aspirantes han visitado el restaurante Oroya, ubicado en el Hotel The Madrid Edition, y llevarán a cabo un cocinado lleno de lujo y sofisticación y en la que el chef peruano Diego Muñoz les dará los platos a elaborar.

Publicidad

Adiós a Luca

Por otro lado, en la prueba de eliminación, los delantales negros tuvieron que replicar elaboraciones creadas por seis chefs que revolucionan la cocina desde la innovación y la puesta en valor del producto local: Lucía Freitas, del restaurante A Tafona (2 Soles Repsol), Javier Sanz y Juan Sahuquillo, del restaurante OBA (2 Soles Repsol), Camila Ferraro, del restaurante Sobretablas (1 Sol Repsol) y Javier Ferraro y Gorka Rico, del restaurante AMA (1 Sol Repsol).

Toda esta complejidad dejaron perdido a Luca, quien se vio desbordado por la situación y presentó un plato más que nefasto de calamares y tinta más bien tirando a crudo. Algo por lo que los jueces no pudieron ni catar, a excepción de Pepe, quien hizo un amago y terminó literalmente con toda la boca negra.

Publicidad

Con todo ello, el quizás aspirante más polémico de la edición se despide del programa, criticado por haber robado ingredientes, por su actitud en algunos momentos y sobre todo con la alegría de Jotha, su eterno enemigo, quien no se cortó a la hora de celebrarlo: «¿Se puede ser más feliz? 22 programas esperando este momentazo, ¡Luca pa' tu casa!».

Cabe recordar que en la gala anterior hubo un nuevo expulsado del programa. El elegido fue Jorge Juan, quien no pudo remontar la prueba de eliminación tras llevar a cabo un desastre de plato en el que tenía que cocinar unas torrijas.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Empieza febrero de la mejor forma y suscríbete por menos de 5€

Publicidad