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Media julio y ya es día 16, festividad de la Virgen del Carmen. Y el mar de Valencia se ha vestido de fiesta. Este domingo los tinglados del Puerto han acogido la misa que cada año se celebra en honor a la patrona de los pescadores y de la Armada Española. La celebración, presidida por el Arzobispo de Valencia, monseñor Enrique Benavent, ha congregado a numerosas autoridades civiles, militares y de las fuerzas de seguridad junto con la subdelegada del Gobierno, Raquel Ibáñez. Las Falleras Mayores de la ciudad, Laura Mengó y Paula Nieto, han ocupado lugar de preferencia durante la celebración que ha rendido homenaje a quienes han perdido la vida en el mar con la presentación de una corona de laurel.
Más allá de la amplia representación de concejales de las filas populares y de Vox -no se ha visto a nadie de grupos políticos de izquierda con plaza en el hemiciclo del Ayuntamiento- y de algunos que aspiran a serlo, los tinglados han sido escenario de manifestación de la devoción popular mostrada por varios centenares de valencianos que han participado en estos actos de arraigada tradición en la capital del Turia. Ha quedado demostrado con la asistencia de representantes de lo Rat Penat, de la fiesta del Corpus, así como de varias asociaciones vicentinas que han acompañado a los miembros de la Cofradía de la Virgen del Carmen y de la parroquia de Santa María del Mar, que también hoy han celebrado su fiesta.
La popularidad de esta devoción ha sido uno de los aspectos destacados por monseñor Benavent en la homilía. «En el fondo esta advocación a la Virgen del Carmen es tan popular porque es expresión de lo que es el camino de nuestra vida, ese camino que las gentes del mar tantas veces experimentan en su trabajo», ha señalado el arzobispo.
Todos han seguido la misa, pero no cabía duda, de que también todos aguardaban el momento más esperado de la cita, ese en el que la imagen mariana es llevada a hombros por un grupo de marinos hasta la embarcación en la que la Virgen del Carmen se hace a la mar. Ha sido el momento más emotivo.
El público, agolpado en torno al barco, ha disfrutado del momento ofreciendo una imagen en la que proliferaban los brazos en alto con cámara de teléfono móvil en mano en busca de la foto, a la caza del instante en el que la Virgen emprendiera la travesía de homenaje a quienes han perdido la vida en o por el mar. Allí se escuchaban los comentarios de quienes no fallan ningún año contando que hay «barcas que esperan a la Virgen en la salida del puerto». Otras, cuando ya las aguas se hacen más profundas, también la aguardan para hacer sonar sus sirenas, como explicaba una mujer a otra mientras disfrutaban del momento subidas en un banco de piedra desde donde se divisaba mejor la escena.
La jornada no ha podido mantenerse al margen de las circunstancias que rodean a los españoles, y con ellos a los valencianos, que tienen a una semana vista una convocatoria electoral nunca vista en vísperas de una fiesta del Carmen. Así, no sólo autoridades recién estrenadas, también aspirantes a serlo, han asistido a la celebración. Los candidatos al Congreso por el PP Esteban González Pons y Belén Hoyo no se han perdido este encuentro que a González Pons le ha valido para conversar con algunos valencianos que se han acercado a él e incluso alguno le ha arrancado una fotografía. Tampoco el también candidato al Congreso Fernando de Rosa se ha perdido la fiesta.
Como en cualquier celebración ha habido notas de color que han concedido carácter festivo al encuentro en torno a la patrona del mar. Aun cuando ha sido una mañana de poco calor y en la que dado el lugar del encuentro soplaba amable y agardable brisa, no han faltado los abanicos. La concejal popular María José Ferrer Sansegundo lo ha aireado de color azul, acorde con su vestimenta -azul y blanca-, así como con el color representativo de la Virgen que, claro está dado el motivo de la celebración, también ha decorado el altar. No se puede aceptar o descartar alguna otra coincidencia. Su compañero de filas ahora candidato al Congreso por Valencia Fernando de Rosa se ha abanicado con una pieza más clásica, de tono madera.
No han olvidado el tradicional instrumento para refrescar el aire, sin embargo algunos si que se han dejado en casa la medalla que les acredita como concejales del Cap i Casal. Juan Carlos Caballero y María José Ferrer Sansegundo han acudido sin ella, mientras que sus compañeros José Luis Moreno, Santiago Ballester, Rocío Gil y Carlos Mundina han salido de casa pertrechados con el distintivo, lo mismo que Juanma Badenas, de la bancada municipal de Vox. En celebración, de carácter religioso, no sólo se han visto notas de color. El recogimiento se ha personificado en Juanma Badenas y a Juan Carlos Caballero, a quienes se ha visto arrodillados en el momento de la consagración.
Las celebraciones se trasladan por la tarde desde la orilla del mar al centro histórico de la ciudad. En el barrio del Carmen, la cofradía de Nuestra Señora del Carmen, con sede en la parroquia de la Santísima Cruz, celebrará la procesión a las 20 horas. Es el último acto de una jornada que arranca con la misa de descoberta celebrada a las ocho de la mañana y la misa mayor al mediodía.
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Melchor Sáiz-Pardo y Álex Sánchez
Patricia Cabezuelo | Valencia
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