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Jorge Pinés
Valencia
Domingo, 20 de agosto 2023, 00:49
Venía avisando en los últimos años, el Mundial femenino de Nueva Zelanda es solo la confirmación de que la semilla que fue plantada años atrás y que ha acabado germinando. Y es que el éxito de la selección española ha provocado que un país entero se vuelque con un grupo que no ha tenido nada fácil llegar hasta donde está. El fútbol femenino, imparable a su paso, está calando en la sociedad española y cada vez son más las niñas que se animan en pedir a sus padres como regalos botines de fútbol, balones o una inscripción en el club del barrio o población donde residen.
Gran parte de culpa de este éxito la ha tenido la Comunitat Valenciana. Un territorio que ha sido pionero junto a otras regiones como el País Vasco o Cataluña en la profesionalización del fútbol para mujeres. Una comunidad autónoma que cuenta con referentes pioneras como Kubalita, portera titular de la primera selección española o con Ruth García, incombustible leyenda del Levante y del combinado nacional que pudo opinar en LAS PROVINCIAS sobre la situación del fútbol en la Comunitat: «Se está apostando por el fútbol femenino valenciano, ya que la Federación Valenciana ha apostado por impulsar a las jugadoras jóvenes. Estas chicas son referencias para las niñas de la Comunitat y para todo el país».
Ahora mismo son dos jugadoras valencianas las que han podido contribuir a que España pueda disputar una final mundialista por primera vez en el certamen femenino, algo que echando la vista unos años atrás parecía una gesta imposible. Es el caso de Ivana Andrés y Enith Salón, dos deportistas con una participación distinta durante el campeonato pero que sin lugar a dudas han hecho méritos para estar allí. Otra jugadora que no es valenciana pero que es de los equipos de la Comunitat es la delantera Alba Redondo.
La que más minutos está teniendo es precisamente la manchega. La jugadora del Levante, pichichi el curso pasado en la LigaF, está siendo una jugadora importante en los planes del seleccionador español, Jorge Vilda. Nacida en Albacete, ha participado en todos los encuentros del Mundial. Comenzó siendo suplente en los tres primeros partidos pero sus buenas actuaciones hicieron que el entrenador confiase para ponerla de titular en los tres últimos, llegando a anotar un gol ante Suiza.
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Por otra parte, Ivana Andrés no está teniendo suerte en el certamen internacional. La veterana jugadora de Aielo de Malferit partía como favorita para ocupar la posición de central pero los problemas con las lesiones le han hecho que solo pueda disputar dos partidos completos y trece minutos de la victoria ante Países Bajos. No obstante el liderazgo y la importancia dentro del vestuario de la jugadora del Real Madrid ha contribuido en los éxitos de la selección. Y es que cabe recordar que Andrés ha disputado los tres Mundiales en los que ha participado España.
La presencia de Enith Salón ha sido totalmente diferente. La meta del Valencia tiene el rol de tercera portera en los planes de Vilda. Un hecho que se confirmó cuando el seleccionador decidió poner a Cata Coll antes que a Salón cuando el nivel de Misa no le pareció bueno. No obstante, la de Moncada tiene tan solo 21 años y es un proyecto de futuro tanto para el club blanquinegro como para España.
Y es que el fútbol valenciano está en auge. Levante, Valencia y Villarreal son una representación de lujo de la terreta en el panorama nacional e incluso en algunos casos internacional. El Levante, club femenino español más laureado de la historia, tiene este año la opción de volver a disputar la Champions League femenina. El equipo debe superar dos cribas para acceder a la fase de grupos. No es la primera andadura del equipo granota en Europa, ya que a comienzo de siglo el conjunto de Orriols fue capaz de hacerse con seis Ligas y participar hasta en tres ediciones del certamen continental. Jugadoras insignia como la ya mencionada Ruth García o la meta alicantina Sandra Paños han sido las bases del fútbol español que ha conseguido llegar a la final del Mundial de Australia y Nueva Zelanda.
Un éxito en el que tuvo un papel fundamental Dolores Escamilla, una de las grandes precursoras del fútbol femenino valenciano y del nacimiento de la sección dentro de la estructura del Levante. Aquel equipo pionero llegó tras la absorción del San Vicente Valencia para convertirse en el Levante femenino y fueron 13 años los que dedicó a que aquel proyecto, además de ganar títulos, se convirtiera en la semilla que hace que en 2023, repasando la plantilla de la selección española que se ha clasificado para la final del Mundial, 9 de las 23 jugadoras convocadas hayan pasado por el Levante.
El Valencia es un club asentado en Primera División que cada año sigue creciendo. El equipo blanquinegro, con raíces en el Colegio Alemán, tomó su nomenclatura actual en el año 2009. Desde entonces el equipo ha conseguido permanecer en la categoría, llevar jugadoras a la selección, crear una férrea rivalidad con el vecino, disputando multitudinarios derbis tanto en Mestalla como en el Ciutat de València eincluso llegar a una final de la Copa de la Reina que lamentablemente acabó perdiendo ante el Sporting de Huelva.
En cuanto al Villarreal, es el equipo con menos recorrido de la Comunitat. Lograron su primer ascenso en la temporada 2020-2021 y desde entonces han pasado dificultades para poder conseguir mantener la categoría. No obstante, el trabajo está siendo bueno y con jugadoras como Salma Paruello, autora del primer gol ante Suecia y que llegó a compaginar el atletismo con el fútbol, está haciéndose un hueco en el panorama nacional.
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