La xenofobia, un problema puntual ante el que el fútbol base necesita herramientas
Los clubes modestos reclaman formación a pesar de las campañas de LaLiga y las iniciativas de la Generalitat o la Federación autonómica
El fútbol profesional español se puso las pilas frente al racismo –al menos en cuanto a a gestos se refiere– después del episodio de Vinícius ... en Mestalla. Esto es algo que ha afeado varias veces Diakhaby, pues resalta que no hubo la misma contundencia cuando él denunció haber sido insultado por Cala. El caso es que más allá de gestos que dan la vuelta al mundo, LaLiga y la Federación Española sí llevan a cabo cada cierto tiempo charlas formativas sobre normativa respecto a aspectos puntiagudos: apuestas, intentos de sobornos... y xenofobia en el deporte.
Los clubes modestos, no obstante, reclaman más formación y alertan de que muchas veces no tienen herramientas para atajar situaciones relacionadas con el racismo (u otras conductas violentas). «El fútbol es el reflejo de una sociedad, que vemos que está polarizada. Además, teneos una realidad normalizada, de que es totalmente habitual que coexistan varias nacionalidades. Ahora por razones obvias tenemos más ucranianos, pero también convivimos con africanos, sudamericanos...», señala Gabriel Salinas, director general del CD Malilla, que propone: «Hay unos protocolos que existen y se aplican a nivel arbitral, pero estaría bien hacer una promoción activa. También es positiva cualquier campaña de sensibilización».
Gabriel Salinas destaca que conductas racistas, igual que violencia de otra índole, pueden darse en diferentes ámbitos relacionados con el fútbol: la competición es uno de ellos, pero el abanico se abre a los entrenamientos y, claro está, a las redes sociales. Por ese motivo, la lucha es amplia frente a un problema que, según fuentes federativas, es puntual.
Al menos, de los que hay registro: sólo en el ámbito de los partidos, cada fin de semana se disputan unos 3.500 y sólo queda constancia si el árbitro lo refleja en el acta. Ante este laberinto, la Federació de Futbol de la Comunitat Valenciana puso en marcha en 2019 el Comité de Valores. Ese estamento nació para abordar los casos más complejos, quedó un poco en el limbo con el estallido de la pandemia y ahora se ha reactivado.
También la Generalitat combate la violencia en el deporte, en especial en el ámbito de la base. Según fuentes de la Dirección General de Deportes, en 2024 se abrieron 41 expedientes sancionadores por incumplir la Ley del Deporte con conductas como el uso de armas o peleas, sin especificar en cuántas hay un poso racista. Además, este organismo autonómico ha impulsado la figura del delegado del mejor con la idea de que esté presente en todas las escuelas y clubes, así como un protocolo ante casos de violencia física o verbal a menores de 18 años.
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