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Víctor Serrano
Lunes, 31 de octubre 2022, 01:46
Madre y jugadora internacional de balonmano. Shandy Barbosa nos atiende con una sonrisa desde el hotel de concentración de Torrevieja, donde están instaladas las 'Guerreras' ... para el torneo internacional previo al comienzo del Europeo. Montenegro, Macedonia y Eslovenia son las sedes del próximo campeonato continental, que comienza el próximo viernes. Subcampeona del mundo y de Europa, está lista para un nuevo reto con el combinado nacional.
–¿Cuáles son sus sensaciones para el Europeo?
–Va a ser un campeonato muy complicado, vamos a intentar hacer un buen papel para coger plaza para el preolímpico. Hay muchas caras nuevas, pero el grupo está trabajando muy bien. Ahora tenemos el último torneo antes de ir al campeonato de europa. Jugamos el fin de semana contra Egipto, Suiza y Túnez en Torrevieja.
Tenemos que ajustar, trabajar la defensa e ir al campeonato lo más frescas posibles en un grupo complicado.
–¿Cuál es el papel de las valencianas en la selección?
–Es una mezcla de gente joven y con más experiencia. Por ejemplo, Lara tiene ya bagaje a nivel internacional, lleva muchos años en la selección. Paula está entrando fuerte y para nosotras es un orgullo que una valenciana como ella muestre esa energía. Silvia es una referente a nivel nacional y mundial y es un seguro al 100% para nosotras.
–¿Cómo ha sido la vuelta para jugar en Sagunto?
–Sagunto es mi casa. Cuando deje de jugar a balonmano seguiré allí. Tengo a mi marido, a mi hijo y a la hija de mi marido. Quiero ayudar al club y a la gente joven. Es cierto que me surgieron ofertas para jugar en España y en el extranjero, pero mi intención era volver a casa y disfrutar de lo que más me gusta. Llevo muchos años a alto nivel, he querido volver a casa para estar cerca de mi familia y disfrutar del balonmano. Estoy viviendo el presente con el Balonmano Morvedre y si me encuentro en buenas condiciones seguiré representando a la selección española.
–¿Cómo va esta temporada la competición con el equipo?
–Este año se ha hecho una liga diferente. Es muy competitiva, ya hemos tenido tres jornadas y si no estás al 100% cualquiera puede ganarte. Y para mí es un reto intentar subir al equipo. Con mi ayuda y el resto de compañeras podemos hacerlo. No quiero que la gente piense que estando Shandy Barbosa lo va a hacer todo. Ahora el nivel del balonmano es diferente. Con mi experiencia si el equipo está funcionando en los momentos complicados ahí estaré. El reto es subir a Liga Guerreras y estoy con ganas de volver a hacerlo esta temporada.
–¿En qué ha cambiado el balonmano ahora?
–Hay mucho físico, mucho uno contra uno. Antes los equipos intentaban hacer más ataque posicional y ahora es más defensa y contraataque. Si físicamente no estás bien vas a tener muchos problemas.
–Sobre su faceta como madre, ¿cómo se gestiona?
–Lo llevamos bien, tengo un marido ‘diez’ que me ha ayudado desde el primer momento. Ha hecho su papel de padre y creo que tenemos que cambiar esa mentalidad de que la mujer tiene que tener el hijo y quedarse en casa. Ellos también están capacitados para hacer esto. En mi caso me ha acompañado en todo momento y ha sido más fácil volver al alto nivel con su ayuda. Quizás si no es así sería muy complicado. Es difícil dejar al niño en casa para venir a la selección, pero el esfuerzo merece la pena.
En la selección, Silvia Navarro también es mamá y es algo que estamos reivindicando. Estamos abriendo puertas para que la mentalidad cambie. En mi etapa en el Nantes tuve problemas por esto. Al principio fue muy complicado. El club apostó por mí, pero yo quería ser madre. Esto no les sentó bien y al principio querían romper el contrato y pusieron muchos problemas. La ley en Francia tiene un sindicato de jugadoras y la ley protege a la mujer. Después de dar a luz estuve al año siguiente con el equipo y fue un duro reto después de ser madre y querer volver a mi nivel, para demostrar al club que forma parte del deporte y que podemos compaginar las dos cosas.
–¿Qué cambiaría si volviera atrás?
–Creo que he aprendido de los errores cometidos y con la experiencia he seguido aprendiendo. Cuando eres más joven tienes la inexperiencia. A nivel personal después de ser madre, esa tranquilidad que necesitaba el grupo ya la he tenido. Llego a Sagunto con 17 años. A lo largo de estos años he disfrutado mucho, he sufrido mucho, pero creo que también he aprendido. El deporte te da eso al final.
–¿Un mensaje que lanzaría a los pequeños que se inician en el balonmano?
–Que disfruten del deporte, que si quieren llegar lejos que sigan trabajando. Es complicado ser deportista profesional, pero si le pones ganas y constancia puedes llegar, pero sobre todo, que disfruten del deporte.
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