![El ganador del ébola que también patea al coronavirus](https://s1.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/202005/04/media/cortadas/rugby-RPpBWsPBn6ALKGCQrbBIiGM-1248x770@Las%20Provincias.jpg)
![El ganador del ébola que también patea al coronavirus](https://s1.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/202005/04/media/cortadas/rugby-RPpBWsPBn6ALKGCQrbBIiGM-1248x770@Las%20Provincias.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
Felix Sesay se ha convertido en un auténtico especialista en la suerte de melés a vida o muerte que son las epidemias. El africano no escatima esfuerzos. Empuja en equipo para doblegar al virus. Lo ha demostrado ya en dos ocasiones de su vida. Sin miedo ni titubeos, se ha enfrentado al mortífero ébola y, ahora, al coronavirus. Sabe que atajar la pandemia es sinónimo de recuperar el rugby, uno de los pequeños placeres que ha hallado en Valencia.
«En mi país sólo se juega a fútbol. Yo llegué a la segunda división, pero a mí lo que me gusta es el rugby, me encanta patear fuerte», señala Felix Sesay, que llegó en 2018 en el Aquarius. «Uno de los trabajadores sociales me comentó que en Valencia se podía jugar. Se me abrieron los ojos. Le respondí: '¿Dónde? ¡Dímelo, por favor!'», recuerda. Días después se presentó en las instalaciones del río donde conoció el CAU, lo que ahora es como una segunda familia para él. En el club le ayudan y milita en el tercer equipo senior.
La vida de este africano sonriente y apasionado por el rugby no ha sido, para nada, sencilla. Ha entendido la importancia de ayudar a los demás y, aunque sobrevive con lo justo, en estos días dedica gran parte de su tiempo al voluntariado a través de la Cruz Roja. «Estoy repartiendo alimentos, yendo a comprar o a lo que necesiten personas mayores en estos tiempos de coronavirus», precisa.
Ahora no tiene miedo. Lo perdió en 2014. Entonces vivía en Sierra Leona, su país de origen. «Allí la epidemia de ébola fue muy fea», subraya con un tono ensombrecido. En su rudimentario castellano explica a la perfección una experiencia terrible en la que tampoco le tembló el pulso. «Estuve trabajando para la Cruz Roja y para Médicos sin fronteras», indica Felix Sesay.
Fea, repite. Muy fea, pronuncia una vez más. Está ganando tiempo. Le entristece cada vez que recuerda lo que vio hace ya más de un lustro como consecuencia del ébola. «Ahí era complicado entrar en las casas a atender a la gente. A veces te los encontrabas muertos en el suelo y había que hacerles la prueba en la boca para ver si habían fallecido por el virus», recuerda: «Con el coronavirus, al menos te puedes saludar con el codo. Con mascarilla y guantes, siguiendo unas precauciones, es posible contactar con otras personas. Con el ébola no, es muy feo».
Su vida en África, desde luego, fue para huir sin mirar atrás. Sus padres fallecieron durante unas lluvias torrenciales. «Bajó el agua de las montañas y fallecieron muchas personas en la localidad donde residían», señala Felix. Para entonces ya había estudiado enfermería y había colaborado para luchar contra el ébola. «Pero allí los salarios son muy bajos», lamenta.
Se marchó, primero a Libia, donde estuvo trabajando en un hospital. «No me gustó, la situación del país era peligrosa», subraya. Y Felix volvió a poner tierra de por medio. Esta vez, en la aventura de su vida, a bordo del Aquarius. Como muchos, en busca de un futuro al otro lado del mar.
Ahora sueña con que Valencia sea su hogar para siempre. Guarda un puñado de papeles como su pequeño tesoro. «Tengo la titulación de enfermería. Estuve estudiando tres años y medio en mi país. Quiero ver si puedo homologarlo», comenta Felix Sesay. Mientras eso llegaba, subsistía y disfrutaba con el rugby, que se ha convertido en su vía de escape. Militaba en el tercer equipo del CAU hasta que todo paró.
Lo del coronavirus le sonaba. Su corazón le volvió a decir que debía arremangarse y ayudar. Y en ello está. Para salvar vidas y para recuperar la suya, la nueva, en la que por fin había encajado ese balón ovalado que le cautivó de niño. «Tenía un tío al que le gustaba, fue él quien me lo inculcó», desvela Felix.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.