Bagnaia, bicampeón del mundo de MotoGP a lo grande en Cheste

El madrileño sabía que el secreto estaba en que Bagnaia no estuviera cómodo. Y eso pasaba por que el italiano no liderase la carrera, ni que se decantaran pronto los lugares de podio. El piloto oficial de Ducati podía permitirse hasta ser quinto y, lejos de buscar esa posición y correr con la calculadora, ha salido al ataque. Tenía a su favor la sanción de Viñales en el warm up matinal, lo que le ha dado la pole.

Ha liderado la carrera y ha tirado a fondo, obligando a Martín a hacer algo distinto, pues no le valía si ser segundo ni escaparse con su rival. En la curva de final de recta, en la frenada más difícil del circuito, ha intentado pasarle al inicio de la segunda vuelta. Lo ha hecho por fuera y ha tenido que aprovechar la escapatoria. Pero ya estaba perdido: Bagnaia ha seguido primero y el español se ha visto relegado a la octava posición.

Y entonces el piloto de Pramac ya ha ido a cuchillo y a contrarreloj. Malos compañeros de viaje. Ha arriesgado con Marc Márquez, porque tenía que adelantar a siete pilotos y conseguir que Bagnaia perdiera posiciones. En la curva de Nico Terol, se ha llevado por delante al de Cervera, que no ha podido despedirse de Repsol Honda en pista.

Caída muy fea, sobre todo por parte de Márquez, que se ha marchado dolorido y ya se verá si esto no le condiciona el test del martes, donde debe estrenarse con Ducati. Ha acudido al centro médico, pero en principio no tiene lesiones de gravedad. Y Martín, al box, entre lágrimas, donde el mismísimo Carmelo Ezpeleta, el CEO de Dorna, ha ido a consolarle. También todo su equipo técnico, encabezado por Gino Borsoi, el director deportivo que también apostó por él en el Aspar Team.

Ha sido una carrera muy accidentada. Caída de Augusto Fernández, así como de Binder y Miller. Cuando se ha visto campeón, Bagnaia ha aflojado y ambos han aprovechado para ponerse en cabeza. Pero luego también se han ido al suelo y esto lo ha aprovechado el ya entonces campeón del mundo para celebrar el título a lo grande en Cheste. Al final ha tenido que apretar porque Di Giannantonio, el piloto que se ha ganado un contrato para 2024 en las últimas carreras, le ha disputado la victoria hasta la recta de meta. Ahí, para inicio de la fiesta de Ducati, se ha lanzado humo con los colores de la Senyera. Zarco ha ocupado el tercer puesto del podio, pedrea en esta ocasión para Pramac.