Hermannsson está dispuesto a bajarse el sueldo para seguir en el Valencia Basket

El puesto de base está monopolizando los primeros días del mercado para el Valencia Basket ya con Álex Mumbrú como entrenador confirmado hasta 2025. Un cambio de modelo que va a marcar el verano, puesto que el proyecto a medio plazo del club ahora también engloba al técnico. Con Van Rossom, las dos partes han llegado a un principio de acuerdo para rubricar una renovación que sea pública antes de que se inicie el contador del derecho de tanteo. A falta del anuncio oficial, ya se trabaja con la certeza de que el belga vestirá por décima temporada de taronja.

La entidad de la Fonteta tiene que despejar otra ecuación. La más complicada puesto que tiene a Hermannsson como protagonista. El islandés se lesionó de gravedad en la rodilla en el último partido de la temporada y el jueves 23 viajó a su país para comenzar las vacaciones tras dos semanas de trabajo de recuperación con los fisios del club. El jugador, tal y como ha podido confirmar este periódico, está dispuesto a bajarse el sueldo para seguir en el Valencia Basket y confía en poder acortar los plazos de una recuperación a la que se va entregar al máximo este verano. La temporada opcional, en la redacción original del contrato le colocaba como uno de los salarios más altos de la plantilla, es inviable con el jugador fuera de las pistas hasta el primer trimestre de 2023 si se cumplen las estimaciones médicas. Las dos partes trabajan para encontrar una solución intermedia. Antes de la lesión, el rendimiento de Hermannsson fue sobresaliente. Cosa que no ocurre con Dimitrijevic, con contrato hasta 2025 y que no tiene asegurada su continuidad.

El club fichará a un base, con Crish Jones como una de las opciones. El americano con pasaporte armenio militó la pasada temporada en el Asvel Villeurbanne, con el que promedió 14 puntos, 4 asistencias y 42% en triples en la Liga Francesa y 13 puntos y 39% en triples en la Euroliga. Otro de los perfiles que se sigue de cerca, como en cada ocasión en la que ha tenido que decidir con su futuro desde que salió de la Fonteta en 2012, es Nando De Colo. Dependiendo de la decisión final con Hermannsson y Dimitrijevic, con el que no se descarta una cesión, el Valencia Basket tendrá que incorporar uno o dos jugadores en el puesto de base teniendo en cuenta que se va a una plantilla larga de más de doce jugadores.