Del sonrojo a la victoria

El Valencia Basket, como ocurrió en el partido de la ACB esta temporada contra el Casademont Zaragoza en la Fonteta, despertó a tiempo para limar una gran diferencia en contra y llevarse el partido. En esta ocasión el susto fue mucho más sonrojante puesto que ya no existe la 'interferencia' de la Euroliga y el argumento del desgaste de la doble competición, el rival era el penúltimo de la ACB que está a dos triunfos de la salvación y que, además, desde el jueves no ha pudo preparar el partido en condiciones.

Cuando Athinaiou anotó el 17-38 a 7:39 para el final del segundo cuarto el Valencia Basket decidió que iba a comenzar a jugar. Nunca es tarde por mucho que sea sonrojante tener que hacerlo cuando el penúltimo de la ACB, que estuvo parado en los últimos días por positivos de coronavirus, esté +21 en un partido en la Fonteta. Gracias al aumento de la tensión defensiva, el listón estaba por debajo del parquet con lo cual no fue muy complicado, los taronja amasaron un parcial de 15-4 (32-42) gracias a la entrada de Hermannsson. El islandés, con un +6 en el ratio del +/- en pista, ayudó a que el marcador estuviera abierto al descanso. Ese 42-51 fue, de largo, la mejor noticia para los taronja hasta ese instante. Lo del primer cuarto, con 17-33 en la anotación, 11-37 en la valoración, 5 pérdidas y un -80 acumulado por los jugadores del Valencia Basket en ese +/- en pista forma parte del particular museo de los horrores de la temporada.

Afortunadamente, los taronja ya habían comenzado a poner los cimientos de la remontada y fueron sumando jugadores a una rotación que al alargarla resultó imposible de frenar para un Bilbao Basket sujetado con pinzas. En el tercer cuarto el despertar fue para Derrick Williams, que con 10 puntos casi consecutivos (incluyendo un mate de concurso para poner el 59-59) se mostró imparable para la defensa vasca. Se sumó Kalinic desde la defensa, después de que el serbio estuviera sorprendentemente apagado en labores de intendencia en el primer cuarto para que Zyskowsi le anotara 12 puntos consecutivos en el emparejamiento. Gracias a un robo y a una contra rápida llegó la primera renta del partido para el Valencia Basket. Era sólo un 61-59 con 14 minutos aún por disputarse pero para los de Mumbrú fue un mazazo. El Bilbao Basket, eso sí, aguantó hasta el final del tercer cuarto con el partido igualado (72-72).

En el último cuarto el que dio el paso al frente fue Prepelic. La puntilla para los hombres de negro. Con los puntos del esloveno, que se marchó a los 17 puntos en ese último periodo, llegó el estirón definitivo pero hasta poder sentenciar el partido pero el Valencia Basket aún tuvo que pelear en un intervalo de intercambio de canastas (81-81 o 85-85). Cuando los taronja pusieron una pequeña renta de cuatro puntos (89-85) el Bilbao Basket ya estaba a dos posesiones la diferencia en el marcador y el final se le hizo muy largo. Un triple de Labeyrie (95-87) fue la puntilla para la victoria. Restaban menos de dos minutos para el final y el parcial en los últimos 25 minutos de partido (desde la máxima renta de los visitantes) ya era de 78-49. El despertador sonó a tiempo para amarrar la quinta plaza pero el Valencia Basket no puede volver a entrar a un partido de una forma tan indolente.