Los agentes de la propiedad niegan que los pisos turísticos afectan directamente al precio del alquiler

El precio por metro cuadrado en la provincia se incrementó durante junio hasta los 12,1 euros a pesar del aumento de la demanda, que, principalmente, se debe a la finalización de los contratos de estudiantes tras el final del curso. Del mismo modo, el incremento de pisos turísticos en la provincia también se ha multiplicado, aunque la explosión de este tipo de viviendas - más de 100.000 registradas en toda la Comunitat- no «afecta directamente al mercado de la vivienda en alquiler», según Vicente Díez, vicepresidente y portavoz de COAPI.

De hecho, la percepción del representante valenciano es que la afección de esta problemática es mínima, puesto que se han desarrollado medidas de contención sólidas por parte del Consell para evitar que los pisos turísticos puedan tener una influencia mayor en el precio del alquiler.

«Muchísimas plantas bajas que antes estaban cerradas se han reconvertido a vivienda turística y no debemos olvidar que esta no puede ser vivienda habitual porque legalmente no es posible. Entonces entiendo que eso no supone un problema para el tejido de la vivienda en alquiler tradicional. Los que están en primeras, segundas o terceras plantas sí, pero eso se ha corregido de forma muy intensa», ha explicado Díez.

Asimismo, el portavoz de COAPI consideró que existen «otras variables que afectan mucho más» a la hora de analizar el precio medio del alquiler en la Comunitat. No obstante, Díez sí que reconoció que la vivienda turística puede causar confrontaciones en los barrios más turistificados: «Otro tema es el problema social que puede causar y que tengas turistas debajo de tu casa que puedan montar follón, pero no afecta directamente al mercado de alquiler».

Por su parte, Luis Fabra consideró que el foco no debe ponerse sobre la problemática que pueden generar los pisos turísticos sobre el precio del alquiler ni en las posibles solcuiones, sino más bien en la búsqueda de responsables. «Vamos a dejar que ahora nos apliquen unas normas, porque nos dicen que el problema está en el alquiler turístico cuando antes nos decían que el problema era el precio. Se limitó y se ha agravado el problema. Han demostrado una incompetencia más que notable aquellos que intentaban solucionar el problema», ha protestado el responsable del informe sobre el mercado inmobiliario.

En ese sentido, Fabra considera que la falta de incentivos está provocando que la oferta no aumente a un nivel suficiente como para reducir el precio, por lo que ha exigido seguridad jurídica para los propietarios de viviendas. «Hay que conseguir que las viviendas que ya existen salgan al mercado y para hacer eso no hace falta dedicar recursos públicos, sino aumentar la seguridad jurídica», y que los contratos de alquiler suscritos «se cumplan», ha concluido.