El comercio local achaca los cierres a la «competencia desleal» de firmas online

Y es que, según explica, la digitalización de las ventas es una herramienta al alcance también del comercio local y que está suponiendo una vía de supervivencia también para aquellas que saben sacarle partido. No obstante, a veces esto no es suficiente al tener que enfrentar a numerosos costes que, en cambio, no deben sufragar competidores que sólo se dedican a la venta por internet. «El mayor problema es la competencia desleal que hacen las grandes plataformas de comercio online puro, que tienen dos ventajas competitivas que hay que revisar: la infrarregulación y la fiscalidad», apunta Torres.

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En este sentido, destaca la brecha que hay entre este tipo de compañías y el comercio de proximidad en cuanto a la regulación a la que deben hacer frente para desarrollar su actividad. «Las pocas normas que los controlan respecto a un comercio físico, ya sea grande o pequeño, es una ventaja que tienen», agrega.

«Además está la ventaja fiscal, que aún pesa más. Aquellos que están radicados en paraísos fiscales no pagan impuestos por las ventas que hacen en Europa. Esto es desleal», añade el representante del pequeño comercio valenciano. «El problema no es el comercio online en sí, sino aquel que se hace en condiciones injustas», señala.

A esto hay que añadir otro tipo de frentes y desafíos a los que se enfrentan los autónomos de este sector. «Hay que hacer más atractiva esta actividad profesional a los jóvenes para que se animen a emprender o a trabajar en ella», indica Torres. Pero, además, esto se relaciona con el escaso relevo generacional de estos negocios familiares. «A veces no hay nadie en la familia que se quiera dedicar a ello. Son pequeñas empresas o microempresas que son igual de atractivas y se pueden gestionar bien y es lo que tenemos que trasladar a la gente joven», subraya Torres.

Y, por supuesto, la inflación también está detrás de ese cierre de más de 1.200 negocios en la Comunitat desde noviembre de 2022. «La falta de disponibilidad económica en las familias. Los costes han llevado a la gente a elegir en qué se gasta el dinero. Primero va lo necesario, la alimentación, y se va reduciendo en aquello que es más superfluo», afirma el presidente de Confecomerç. En concreto, según ha detectado Torres, decrece el consumo en todo lo que tiene que ver con equipamiento personal; moda, complementos, hogar, algo que está pasando factura al comercio de proximidad. «Se invierte más en ocio, en restauración, aunque el ticket medio sea inferior, en pequeños viajes. Esto es consecuencia de la pandemia, de la necesidad de vivir y disfrutar y de vivir experiencias. Es una mezcla de todo», agrega.

Según los datos más recientes facilitados por ATA a este periódico, entre noviembre de 2022 a noviembre de 2023, la región valenciana ha perdido a 1.205 emprendedores del sector del comercio, una caída del 1,4% en un año, pero la más acusada en términos absolutos de entre todos los sectores donde se reduce el número de trabajadores por cuenta propia. Con esta caída, el número de autónomos con un negocio en el sector del comercio se sitúa en 87.309 en la Comunitat Valenciana.