![La Comunitat, a la cola de España en la calidad del empleo](https://s2.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/2023/11/14/Presentacion_Calidad-Empleo_FundacionRAreces_Ivie_14112023_02-U210717736123yHH-1200x840@Las%20Provincias.jpg)
![La Comunitat, a la cola de España en la calidad del empleo](https://s2.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/2023/11/14/Presentacion_Calidad-Empleo_FundacionRAreces_Ivie_14112023_02-U210717736123yHH-1200x840@Las%20Provincias.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
El tejido productivo, con gran peso del sector turístico, y el escaso tamaño de las empresas siguen suponiendo una rémora para la calidad del mercado laboral valenciano, que se sitúa a la cola de España. Así lo demuestra el índice sintético elaborado por la ... Fundación Ramón Areces y el Ivie en la monografía 'La calidad del empleo en España y sus comunidades autónomas', presentado este martes en Valencia.
En concreto, la región valenciana es la quinta autonomía con peores índices de calidad en 2023, pese a ser la cuarta que más mejoró en diferentes ámbitos respecto a 2007, el año con la mejor tasa de empleo de los últimos 40 años. Sin embargo, el informe analiza el empleo más allá de variables cuantitativas y destaca que la calidad de dicho empleo sí se sitúa actualmente en el valor máximo del periodo 2007-2022.
La estabilidad laboral, el tipo de jornada y de ocupación, la conciliación, los salarios percibidos o la siniestralidad son algunos de los 18 indicadores de calidad analizados en este índice, que en 2022 se sitúa 3,1 puntos por encima del de 2007. El informe, elaborado por los investigadores del Ivie y profesores de la Universitat de València Lorenzo Serrano y Ángel Soler, junto con el economista también del Instituto Fernando Pascual, ofrece este indicador para el conjunto del país y también por comunidades autónomas.
La mejora entre 2007 y 2022 se observa en todas las regiones, con la única excepción de Extremadura, que sigue todavía por debajo de su nivel de 2007. Los mayores incrementos en calidad del empleo se han producido en Cataluña, Murcia, Castilla-La Mancha y Comunitat Valenciana, que mejora 3,4 puntos, mientras que los más débiles se han registrado en Canarias, Cantabria y Aragón (en torno a 2 puntos).
En términos de calidad global del empleo los mayores niveles se encuentran en País Vasco, Madrid, Cataluña, Navarra y La Rioja, todas con índices por encima de la media nacional. Por el contrario, la situación menos favorable se muestra en Extremadura, Canarias, Andalucía, Murcia y la Comunitat Valenciana.
La mayoría de comunidades, la valenciana incluida, muestran avances en cada una de las cinco dimensiones consideradas, lo que refleja una evolución positiva de la calidad del empleo desde 2007. «Sin embargo, eso no significa que no existan problemas relevantes, incluso algunos agravados, así como importantes diferencias entre las regiones», explica Serrano.
En materia de estabilidad laboral, la tasa de temporalidad sigue siendo muy elevada en el tercer trimestre de 2023 (17,3%). Por comunidades, Extremadura se acerca al 28% de trabajadores temporales, más del doble que en otras como Madrid o Cataluña. El porcentaje de ocupados que tiene contratos temporales en la Comunitat Valenciana se sitúa en el 19% en el tercer trimestre de 2023, con lo que supera la media nacional del 17,3%. Eso sí, el sector público es el que más temporalidad registra con diferencia. «Casi dobla a la del sector privado en la Comunitat», señala Serrano.
Noticia relacionada
Además, en la autonomía el peso de los ocupados que tiene un empleo a tiempo parcial no deseado alcanza el 7,1%, solo por detrás de Extremadura (7,7%) y Andalucía (8,1%). De media, el 6% de los ocupados en España tiene que conformarse con un empleo a tiempo parcial, aunque desearía uno a tiempo completo, una cifra que representa casi la mitad de los trabajadores con contratos a tiempo parcial. El mínimo de empleo involuntario parcial se da en Baleares, con un 4%.
Otra situación relacionada con la jornada laboral que afecta a la calidad del empleo es la incidencia de las jornadas largas (entre 40 y 48 horas semanales) y muy largas (49 horas o más) que muestra un repunte tras la pandemia. En el tercer trimestre de 2023, el 41% de los trabajadores soporta jornadas largas y el 5,8%, muy largas. En la Comunitat Valenciana, el 6,3% de los ocupados trabaja en jornadas iguales o superiores a 49 horas semanales, lo que supone medio punto por encima de la media nacional. Además, el 15,9% de los ocupados trabaja al final de la tarde (16,6% en España), un 5,8% por la noche (frente a 5,4%), los sábados (27,3% en CV, frente 28,3% de media nacional) o los domingos (14% vs 17,1%) y un 23,8% de los asalariados trabaja a turnos, frente al 21,9% de la media española.
La Comunitat Valenciana es, junto al País Vasco, la región con mayor porcentaje de ocupados que quiere modificar su jornada laboral. En total, el 19,3% de los ocupados de la Comunitat, frente al 14,8% de la media nacional, desea una jornada diferente, ya sea con más horas para poder aumentar sus ingresos (10,7% vs 9,1% de España) o con menos horas, incluso renunciando a parte del salario (8,6% vs 5,6%). Este último grupo está creciendo durante la última década, mientras se reduce el de los trabajadores que quieren aumentar su horario laboral.
Noticia relacionada
En cuanto a los avances en la calidad del empleo, el informe destaca el aumento en el porcentaje de las ocupaciones de alta cualificación, que supone ya el 34,5% del empleo total en la Comunitat Valenciana. Este porcentaje se sitúa en línea con el promedio del país del 35,3%, pero está todavía alejado de Madrid (47,1%), País Vasco (41,4%) y de la media de la EU-27 (42,9%). En cualquier caso, la Comunitat Valenciana ha logrado importantes mejoras en este aspecto, ya que en 2007 el peso de los ocupados altamente cualificados era solo del 28,3%. Las diferencias entre regiones son muy evidentes en este indicador, con un porcentaje de ocupaciones altamente cualificadas de solo un 27% en Canarias.
También se observan desajustes sustanciales en sobrecualificación. Un 22,7% de los trabajadores con estudios universitarios en España está empleado en ocupaciones que no requieren formación superior, con datos del tercer trimestre de 2023, el mismo porcentaje que se registra en la C. Valenciana. Sin embargo, es de las pocas regiones que ha conseguido reducir el peso de la sobrecualificación, respecto a 2007, cuando se superaba el 25% de titulados universitarios ocupados en trabajos que no requieren ese nivel de formación.
Del mismo modo, y pese al repunte tras el año de la pandemia, se aprecian importantes mejoras en el índice de siniestralidad laboral, con 2.951 accidentes por cada 100.000 trabajadores en 2022, frente a los cerca de 6.000 que se registraban en los años previos a la gran recesión. La Comunitat Valenciana es una de las tres regiones con menores cifras de siniestralidad, tras conseguir reducir la cifra desde los 5.596 accidentes por cada 100.000 trabajadores en 2007 a los 2.757 en 2022. Nuevamente persisten las diferencias entre comunidades, con índices de siniestralidad que varían desde los 2.286 accidentes por cada 100.000 trabajadores de Madrid hasta los 4.893 de Baleares.
Por el contrario, en materia salarial, el estudio confirma que el avance ha sido decepcionante, ya que el salario medio apenas ha crecido en términos reales un 4,9% en la Comunitat, entre 2007 y 2021 (5,4% en España), y se sitúa por debajo de los niveles alcanzados en 2009 y 2010. Por regiones, las diferencias entre el salario medio anual alcanzan el 45,2% entre País Vasco, que ofrece los salarios más elevados, y Extremadura, la región con menor ganancia media por ocupado. La Comunitat se sitúa un 9% por debajo del promedio con una ganancia media anual por trabajador de 23.448 euros anuales, frente a los casi 26.000 de España.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.