La llegada de octubre ha implicado la vuelta a la tensión en las calles de Valencia. Una vez ha decaído la normativa nacional que permitía ... operar a cientos de VTC, la autonomía se ha quedado sin una cobertura que ha dado munición a los taxistas para reclamar la práctica desaparición del servicio y que se impongan multas a los conductores con autorización caducada.
Publicidad
Desde el pasado sábado, la mayor parte de las VTC que en la Comunitat Valenciana trabajan adscritas a Cabify o de forma independiente ya no pueden salir a las calles en la práctica al no contar con una licencia en vigor. Esto se debe a que la Generalitat ha evitado aprobar una regulación propia a tiempo. Pese a ello, el servicio opera con cierta normalidad a falta de datos concretos. Según la Asociación Profesional de la Movilidad de la Comunitat Valenciana, es gracias a que siguen saliendo a la calle vehículos con un plazo más extendido.
Pero que el servicio siga en vigor indigna a los taxistas valencianos, que no terminan de creerse los datos. Desde la Confederación de Taxistas Autónomos de la Comunitat Valenciana exigen que se pongan más controles para revisar si los VTC tiene la licencia en vigor ya que aseguran que de las 800 actuales solo pueden seguir ofreciendo servicios urbanos «cinco o seis» al haber interpuesto un recurso individual. Una cifra que elevan a más de un centenar por parte de la asociación afín a Cabify.
La entidad recuerda a sus asociados que si se tiene la matrícula se puede verificar si la licencia está en vigor y anima a revisarlas. Algo que no siempre octubre por las fechas de ejecución. Además, han convocado las mesas de intrusismo de forma urgente para poder contrastar lo que se está haciendo en cada provincia.
Publicidad
«Vamos a esperar unos días, es necesario confiar en los Cuerpos de Seguridad del Estado y los Servicios de Inspección, porque, aunque sabemos que las plataformas que dan servicio a estas VTC, están incitando a las empresas a saltarse las normas, con el actual régimen sancionador les va a ser difícil seguir haciéndolo con impunidad», insisten. Del mismo modo, avisan que si se hace la vista gorda se verán obligados a movilizarse en las calles.
Esta situación, que muchos juristas definen más como un limbo legal al haber una intensa batalla judicial con inciertos resultados, se ha traducido en una tensión creciente en las calles. Durante estos pocos días de octubre ya se han podido observar pequeños enfrentamientos entre taxistas y VTC con pitidos en carretera y acusaciones cruzadas. No llegan al nivel del pasado, cuando se llegó al conflicto físico, pero no son un buen presagio.
Publicidad
La realidad es que hoy por hoy en la aplicación de Cabify se puede contratar un servicio sin muchos problemas, aunque se avisa de que el número de conductores puede ser menor desde el 1 de octubre. Desde la patronal de los VTC no se anima a seguir haciéndolo y las grandes empresas han dejado los coches con permisos caducados en el garaje hasta ahora, pero entienden que muchos autónomos puedan decidir dar este paso de forma independiente, pese a exponerse a multas. Eso sí, las pocas licencias propias de la marca, que ofrece el servicio de forma directa y a través de terceros, siguen operativas.
Según juristas como Domingo Monforte, este conflicto tiene lugar por la falta de actuación del Consell y Les Corts, que han tenido cuatro años para elaborar una legislación propia y han hecho caso omiso. Tan solo realizaron una primera norma sobre el tiempo de precontratación que sirvió para expulsar a Uber y calmó los ánimos, pero no solucionó el fondo del debate. Cabify siguió operando al encontrar un resquicio legal.
Publicidad
Por su parte, la Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad está realizando diferentes encuentros para tratar de sacar adelante una legislación, aunque sea fuera del plazo. Bajo este argumento muchos de los poseedores de licencias VTC consideran que pueden seguir operando. Además, ninguna de las partes descarta que en el futuro una sentencia en los diferentes frentes judiciales abiertos decante la balanza a favor de las VTC ya que Competencia ya ha dado varios avisos al restringirse su actividad frente a la del taxi.
La táctica de Cabify y las empresas vinculadas de que este fin de semana solo hayan operado los vehículos con licencias activas o con recursos ha propiciado que las inspecciones se hayan saldado con solo una multa. Tal y como confirmó la Policía Local de Valencia, se interpuso una sanción a un coche. El vehículo fue inmovilizado y su conductor denunciado. Desde las asociaciones de VTC consideran que esta sanción es testimonial, la adscriben a otros asuntos y recuerdan que lo importante es que la mayor parte de los controles realizados se han saldado sin sobresaltos.
Suscríbete a Las Provincias al mejor precio: 3 meses por 1€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.