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Luz verde a las obras que permitirán el regreso de la alta velocidad de la Comunitat a la estación de Atocha y que abrirán la puerta a que los trenes de las tres operadoras (Renfe, Iryo y Ouigo) puedan tener parada en las dos estaciones de Madrid: Atocha y Chamartín, donde actualmente tienen fijada la cabecera.
Así, el Consejo de Ministros ha autorizado al Ministerio de Transportes a licitar, a través de Adif Alta Velocidad, el contrato para la construcción de la estación pasante de Madrid-Puerta de Atocha Almudena Grandes, que dispondrá de cuatro nuevas vías y dos andenes y se ubicará bajo la actual estación de alta velocidad y la calle Méndez Álvaro.
La estación subterránea cuenta con una inversión estimada de 497,4 millones de euros (IVA no incluido) y conectará el túnel de alta velocidad entre Puerta de Atocha y Chamartín con el nuevo acceso sur de alta velocidad a la capital, que entraron en servicio en julio del año pasado y que permitieron que, unos meses más tarde, entraron en servicio nuevos operadores en la línea de alta velocidad Madrid-Valencia (Ouigo en octubre e Iryo, en noviembre, respectivamente).
Precisamente esa conexión entre la nueva terminal subterránea de Atocha y los túneles se traducirá en que «los trenes de alta velocidad puedan efectuar parada en ambas estaciones», según recoge el comunicado del ministerio en el que ha informado de la autorización para las obras. Eso sí, la decisión final dependerá de las compañías que actualmente prestan los servicios de alta velocidad.
«De esta forma, se completará la conexión total de la mitad norte y la mitad sur de la red de alta velocidad de España, haciendo posible que Madrid disponga de una gran estación de tren con dos terminales, Atocha y Chamartín, y que los trenes del corredor Madrid-Levante hagan parada en Atocha. Así, se incrementará la capacidad y operatividad de este punto neurálgico de la red de alta velocidad de nuestro país«, señala el departamento que dirige Raquel Sánchez.
La previsión que baraja el ministerio es que las obras, que serán financiadas en parte con fondos europeos, se ejecuten a lo largo de cinco años. En este sentido, al menos hasta 2029 los AVE de la Comunitat y de Murcia seguirán en la estación de Chamartín ya que, por un lado, aún debe licitarse y adjudicarse esta obra y, por otro, de forma previa Adif tiene que trasladar dos vías al otro lado de la estación actual.
Actualmente, la alta velocidad entre Madrid y la Comunitat tiene como cabecera de origen y destino la estación de Chamartín, ubicada en la zona norte de Madrid y actualmente en obras para su ampliación. Este cambio, acometido entre verano y diciembre del año pasado, figuraba en los acuerdos de la liberalización ferroviaria pero no trascendió hasta marzo del año pasado.
Debido a la gran polémica en la Comunitat por perder Atocha como estación de referencia, Adif propuso a las tres compañías mantener en esta estación más próxima al centro de Madrid parte de los servicios diarios. Una decisión que Renfe aceptó pero que Iryo y Ouigo descartaron al tener fijadas sus operaciones desde Chamartín. De ahí que Renfe mantenga ocho frecuencias diarias con Valencia y Alicante desde Atocha.
La infraestructura, de gran complejidad, discurrirá de norte a sur a lo largo de la calle Méndez Álvaro de Madrid, aprovechando el desnivel para generar varias cotas en las que desarrollar distintos espacios; conectando tanto con Puerta de Atocha en el norte como con un nuevo vestíbulo en Méndez Álvaro por el extremo sur. También se remodelará la parte norte de Puerta de Atocha, ampliando y mejorando los espacios e integrándola con los accesos a la estación subterránea.
La nueva estación, enmarcada en la Fase 2 del nuevo complejo ferroviario de Atocha, se integrará en el resto de las instalaciones de alta velocidad (utilizando los mismos vestíbulos, filtros de control, etc.) para conseguir el máximo aprovechamiento y evitar la duplicidad de espacios y equipamientos.
La estación pasante será subterránea, pero contará con una gran abertura central que permitirá la entrada de luz a través de un lucernario y un gran muro cortina en la fachada de Méndez Álvaro. Además, facilitará la comunicación visual del espacio soterrado con los elementos superiores.
El nuevo vestíbulo mixto de Méndez Álvaro incorporará el lado oeste de la estación -que contará con una nueva fachada- a los servicios de alta velocidad. El mayor dinamismo de esta zona propiciará un mayor equilibrio viario y contribuirá a la reducción del tráfico rodado en la avenida Ciudad de Barcelona, así como en los paseos Infanta Isabel y Reina Cristina y la calle Alfonso XII de Madrid.
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