Por qué el diésel está más caro que la gasolina

El precio de la gasolina y del gasóleo bajaron por primera vez en lo que va de año, según los datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea, días antes del anuncio de Gobierno de aplicar una bonificación de 20 céntimos a todos los consumidores. Llevaba 11 semanas consecutivas de incrementos y, tras aquella ligera bajada, han vuelto a subir. En concreto, el precio medio del litro de gasolina en España estaba en 1,813 euros, mientras que en el caso del diésel se situaba en 1,797 euros.

Sin embargo, pese a que los precios oficiales sitúan el precio de la gasolina por encima del precio del gasóleo A, la realidad es muy distinta cuando se acude a repostar a la gasolinera, donde encontramos que en una inmensa mayoría el precio del diésel está ya por encima de la gasolina súper 95. ¿Por qué sucede esto? Petroprix, una cadena Low Cost que cuenta con decenas de estaciones de servicio propias en toda España, asegura que es por el propio mercado. «Simplemente se trata de un cambio en la tendencia del mercado. El precio del diésel ha subido más que el de la gasolina y así se traduce en los precios finales de las gasolineras«, explican.

Al mismo tiempo, el Gobierno vigila que se produzcan fraudes en las gasolineras aprovechando la rebaja aprobada y algunos usuarios ya han detectado comportamientos anormales de los precios en los días previos a la entrada en vigor de la bonificación de 20 céntimos.

El precio de la gasolina y el diésel continúa subiendo, pese a que el precio del barril Brent ha caído en una semana de 120 dólares a 109.

«¿Por qué sigue subiendo el precio de la gasolina si el petróleo está cayendo? A este fenómeno se le denomina 'efecto cohete' y 'efecto pluma', ya que la subida del precio del crudo acostumbra a provocar un incremento importante de la gasolina, mientras que un descenso del petróleo no.

El crudo cuenta con su propio índice de referencia internacional, el barril de Brent, mientras que el precio de los carburantes se guía por su propio mercado, y además los criterios para determinar el precio final no son los mismos.

A la hora de hablar de gasóleos y gasolinas, hay que tener en cuenta no solo el valor de la materia prima (el crudo), sino también los costes de refinería, así como el tiempo que transcurre entre la compra inicial y la fase final de dicho proceso. Además, a todo esto, hay que añadir los márgenes de las distribuidoras y los impuestos especiales de los hidrocarburos y el Impuesto de Valor Añadido (IVA), que tienen un gran impacto en el precio de venta el público.

Así, el precio del petróleo está influenciado por la oferta y la demanda, mientras que el precio en las gasolineras está marcado por el precio de compra en el canal de distribución.

Pero volvemos al inicio: ¿por qué el diésel es más caro que la gasolina? Los impuestos que se aplican a la gasolina son del 55%, mientras que el 15 % viene determinado por los costes de distribución y márgenes y el 30 % costes de la materia prima. En el caso del gasóleo, aunque la carga fiscal es algo menor, del 50 %, al igual que los costes de distribución y márgenes(14%), mientras que sube al 36% la materia prima, según explican desde Grupo Moure, un holding que engloba empresas como Elefante Azul, Autonetoil o Petronet.

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