Inespay: la revolución de los sistemas de pago

Inespay es una de esas revoluciones en los cambiantes sistemas de pago. Una plataforma que permite realizar una transferencia bancaria en apenas tres pasos, ¿cómo? seleccionas un producto, le das a comprar, la página te redirecciona a tu banco, pones tus claves... y ya es tuyo. ¿Sencillo, no? Este servicio tiene origen valenciano y sus impulsores, Víctor Pardo y Carlos Castellanos proceden de la banca tradicional. La de ellos es una de esas historias de personas con una vida laboral soñada para muchos pero que llegó un momento que no era para ellos.

«Nos conocimos en un banco, típica banca comercial y desde siempre observamos que las empresas tienen predilección por el método de cobro y pago de transferencia bancaria. Sin embargo, hace diez o doce años ésta estaba muy poco modernizada, actualizada. Hacías una transferencia y tardaba 2 o 3 días en realizarse, ahora a raíz de las normativas ha cambiado. Pero nos llamaba la atención», explica Pardo, quien recuerda el momento en el que empezaron a plantearse ofrecer soluciones a este tipo de cuestiones: «Tanto a mi socio como yo, por circunstancias personales se nos ocurrió emprender, pensamos en aprovechar todo el bagaje que teníamos en el sector para poner en marcha algo en lo que creíamos y que además pensamos que ayudaba a la sociedad en general».

Paralelamente, Pardo había conocido de forma casual a una persona en el gimnasio que contaba con una incubadora de empresas. Llevaba tiempo escuchando hablar de startups, emprendimiento y todo ese mundo que a él le había sido desconocido hasta ese momento.

Plug & Play Spain les acogió: «Nos ayudaron a enfocarnos, a dirigirnos, estuvimos entre cuatro y cinco meses que pasaron volando. Después entramos dos años en Insomnia y finalmente accedimos a Lanzadera». Esta última quedó prendada de la idea y el equipo de Angels Capital, de Juan Roig, invirtieron en ellos. Ahora viven un momento «dulce». Lo están disfrutando, pero con cabeza. Antes de hablar de cuáles son sus planes de futuro, el cofundador de Inespay incide en el proceso que han pasado para llegar al estado de crecimiento actual. Básicamente en una de esas palabras más de moda: la resiliencia.

«Realizamos una aplicación de pagos, lo que ahora se conoce como Bizum, era 2015 e hicimos un 'bizum', qué paso, ¿que en el 2016 llegó Bizum de verdad y acabó con todo lo que había en el mercado hasta el momento, no podíamos competir ante una empresa que tiene capital y recursos ilimitados y además está gestionado por 27 bancos. Éramos humildes y estábamos arrancando», en lugar de abandonar buscaron otra alternativa que les llevó justo hasta el presente.

«Cogimos esa experiencia, esa tendencia y pensamos: ¿y si reutilizamos esto y lo llevamos al mundo de los pagos online para que se pudiese pagar en cualquier tienda online sin tener que meter ni iban ni nada? Algo así como cuando abonas en tarjeta, que lo que haces es seleccionar tu banco, poner tus claves y ya está; el problema viene en que por ejemplo buscas un viaje, unas vacaciones con tu familia que te cuesta unos 5.000 euros y a ver qué tarjeta lo soporta. Te ves obligado a pagar por transferencia pero te dicen: apunte este número, haga transferencia y luego cuando tenga el dinero ya reservo y puede haber subido de precio o lo que sea... así que pensamos en un sistema en el que pagas a tiempo real. Hemos puesto la transferencia bancaria como un método de pago el mismo nivel que tarjeta o Paypal, de manera automática, pero sin tener que poner tantos números», añade.

De este modo, Inespay nace como idea en 2015, pero como empresa actual en el año 2020 ya que se tuvo que pedir la licencia al Banco de España tal y como afirma Pardo: «Antes no existían leyes, en 2019 se publicó la SPD, esa normativa obligaba que cualquier iniciativa parecida a la nuestra debía tener supervisión del Banco de España lo cual nos parecía coherente porque así no hay posibilidad de que se hurten datos y demás. En 2017 pedimos la licencia y nos llegó en el 2020».

En 2023 ha llegado el momento en el que son las empresas las que buscan a Inespay, líder en el segmento. Todos los sectores de negocio ya han asumido que el pago por medios digitales ha llegado para quedarse, sin embargo sí que necesitan tiempo para asimilar algunos cambios: «Las tarjetas están demasiado consolidadas, por defecto pagas con ellas las tiendas online deben tener alternativas. Nosotros debemos seguir comunicando nuestro método de pago en todo el mundo».

«Siempre hay nuevos retos, pero queremos crecer con cabeza, cuando el mercado te pide más, le debes dar para no dormirte pero siempre siendo conscientes de el crecimiento ha de ser en paralelo en todas las vertientes del negocio». Tras asentarse en España y Portugal, han recibido peticiones desde Italia, un mercado que empiezan a tantear para implantarse. Posteriormente los que lleguen. «No queremos una ronda de 10.000.000 de euros para plantarnos en todo el mundo sin haber tenido todo ese desarrollo detrás que permita afrontar la situación», concluye.

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