Autónomos sin relevo generacional: 180.000 jubilaciones en los próximos seis años

Ese es el escenario al que se enfrentan los trabajadores autónomos de la Comunitat a corto plazo. Las cifras así lo evidencian. Según la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) más de la mitad de empleados por cuenta propia con los que cuenta la región hoy en día se jubilarán en los próximos seis años. En cifras absolutas, más de 180.000 jubilaciones y la consecuente pérdida de actividades económicas que todavía son solventes, pero que no generan interés en los empleados que dan sus primeros pasos en el mercado laboral.

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El aumento que ha experimentado en el último año la autonomía valenciana respecto al número de trabajadores autónomos -la variación interanual con respecto a mayo de 2023 ha sido del 1,9%, lo que supone más de 6.000 nuevos empleados por cuenta propia- no solventa un problema que pone en riesgo oficios «tradicionalmente realizados por trabajadores autónomos». Campos como la fontanería, la mecánica o la carpintería afrontan con incertidumbre el futuro. «Curiosamente son oficios que fueron desechados por los emprendedores y ahora se trata de recuperar el tiempo perdido», explica Abad, presidente del sindicato de profesionales autónomos..

El transporte es otro de los sectores más perjudicados. De hecho, los profesionales de la carretera volverán a protestar este viernes en Madrid para reclamar una jubilación anticipada. Una reclamación que puede parecer utópica, ante la falta de relevo de la que ya advertía hace un par de meses la Federación Valenciana de Empresarios del Transporte y la Logística (FVET). «El sector transporte también ha sido abandonado», denuncian desde UPTA.

Este «éxodo hacia la jubilación» no sólo reducirá la cifra de empleados por cuenta propia de la Comunitat, sino que también «tendrá una incidencia brutal» en los pequeños negocios del entorno rural. Desde el sindicato de trabajadores autónomos estiman que las pérdidas más acusadas serán las que se produzcan en «poblaciones de menos de 10.000 habitantes», en las que el envejecimiento de la población activa agudiza todavía más el problema de la falta de relevo generacional.

Para solventar la complicada situación que atraviesan los comercios, que han ido perdiendo presencia en las grandes urbes y disminuyendo su influencia en las localidades de un tamaño más reducido, Eduardo Abad considera esencial cambiar la forma de trabajo e implantar la digitalización. «Debemos ser más productivos con menos horas de trabajo», indica el representante sindical.

La creación de incentivos bidireccionales que permitan un beneficio tanto para el autónomo que está a punto de hacer frente a su última etapa profesional como para el nuevo empleado por cuenta propia dispuesto a tomar el relevo es la solución más adecuada, según UPTA. «Se debe atacar el problema de raíz. Las políticas a medio plazo son las que funcionan para cambiar el trabajo autónomo», asegura Abad.