Los transportistas alertan de una situación de «callejón sin salida»

«Estamos en un callejón sin salida». Es la reflexión que realiza el secretario de la Federación Valenciana de Empresarios del Transporte y la Logística (FVET), Carlos García, sobre la delicada situación que atraviesa el sector a raíz del paro indefinido convocado la semana pasada por la Plataforma para la Defensa del Sector del Transporte de Mercancías por Carretera, que no está presente en el Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC), el órgano de interlocución con el Ministerio de Transportes al que sí pertenece la patronal valenciana.

Un paro, secundado por miles de transportistas en toda España, que ha generado problemas de abastecimiento y de falta de suministros y materias primas en la industria, lo que ha llevado a las patronales del gran consumo a instar al Gobierno a acabar con la «máxima urgencia» con este «problema de Estado» al tiempo que han advertido de que el conflicto amenaza ya la producción y de que peligran más de 100.000 puestos de trabajo.

«Hay mucha preocupación. No salimos de un escenario de conflicto; primero la pandemia y ahora esto [en referencia al paro indefinido que no secunda FVET]. Las posiciones se han salido de la racionalidad», asegura García para quien el Gobierno central «lleva una dinámica que no coincide con la urgencia de las circunstancias y no está siendo eficaz en las negociaciones, le cuesta tener liderazgo», una posición también denunciada por el presidente de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), Salvador Navarro, que ha lamentado en varias ocasiones la inacción del Ejecutivo de Pedro Sánchez.

Y es que el Gobierno ha declinado hasta el momento reunirse con los representantes de la plataforma alegando que no forman parte del órgano que tiene la representatividad del sector (que, además, se renovó recientemente) y que son una minoría. Sí que lo ha hecho con el CNTC y puso sobre la mesa 500 millones de ayudas directas para el sector aunque sin concretar su reparto, lo que provocó el malestar en varias organizaciones como Fenadismer, que ahora se han sumado al paro.

De ahí que el secretario de FVET se muestre pesimista sobre la resolución del conflicto y «cómo romper la dinámica en la que se ha entrado». «Los que han iniciado el paro no se sienten escuchados pero, por otro lado, el sector tiene otros mecanismos de representación institucionalizados. El viernes el Gobierno concretará medidas pero a lo mejor no son válidas para los convocantes. Es una dinámica poco racional, donde lo que importa es subir el tono y reprocharnos unos a otros, no una visión constructiva», reflexiona García, que no comparte «la manera de protestar» de la plataforma.

«La situación se ha desbordado. Es un paro sin saber hacia dónde en lo que se refiere a medidas, tiempos, etc. El sector está en un callejón sin salida», añade el secretario de los transportistas valencianos al tiempo que reconoce la presión existente en el sector y la ralentización de la actividad aunque descarta un desabastecimiento de productos en el corto plazo.

Mientras, la Asociación de Transporte Portuario de la Comunitat Valenciana (Asotraport), que es la representante en Valencia de la plataforma, ha rechazado el paquete de medidas de 500 millones al considerarlo «migajas» y poco concreto. «No sabemos ni cómo se va a distribuir, es un parche», ha comentado su presidente, Álvaro Ortiz.

Por ello, el paro se va a mantener «hasta que no haya una reunión con la ministra y se atienda nuestras peticiones». Además, no se descartan movilizaciones como la realizada este lunes, que consistió en una marcha lenta desde Ribarroja a Valencia.

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