![Un verano histórico destapa las carencias del sector turístico](https://s1.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/2023/08/26/turismo.jpg)
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El mejor verano de la historia, una temporada de récord, el año de la recuperación tras la pandemia, etc. Son algunas de las afirmaciones que se escuchan estas semanas para valorar el comportamiento de un sector que, en el caso de la Comunitat, representa casi el 16% de su PIB, es decir, tiene un peso de 19.402 millones en la economía valenciana (datos cerrados de 2022). Este mismo viernes, por ejemplo, la concejala de Turismo, Paula Llobet, aseguraba que Valencia ha registrado «los mejores datos de su historia» tras situarse este verano como la segunda ciudad de España con mayor recepción de turistas y crecer la llegada de viajeros un 9,1%.
También las previsiones que manejaba la Conselleria de Turismo a comienzos de agosto iban en este sentido: «Uno de los mejores de la historia», señalaba la consellera Nuria Montes tras constatar cifras de ocupación superiores al 90%, como así confirmaba la semana pasada la patronal hotelera Hosbec ya con los datos de la primera quincena del mes sobre la mesa. Incluso extienden esa «tendencia positiva» hasta el 15 de septiembre.
Un optimismo en el sector que ya se vio en la campaña de Semana Santa y que anticipaba un «buen verano», como apuntaba Exceltur, que remarcaba al litoral mediterráneo como uno de los destinos «a la cabeza del dinamismo de ventas previstas para verano de 2023». Eso sí, «con una intensidad levemente por debajo» de los resultados del segundo trimestre del año.
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Álex Serrano López
Todo ello pese a una economía que todavía se resiente de la pandemia y de las consecuencias de la guerra en Ucrania, con un encarecimiento de los precios (alojarse en un hotel de la Comunitat cuesta ahora 26 euros más que antes de la pandemia) que no ha frenado las ganas de irse de vacaciones, aunque sea por unos días, ya que la estancia media –situada en 3,39 días– se ha acortado. Atrás quedan aquellas escapadas de 10 días, pues lo habitual son entre tres y cinco. «Este verano la sensación que tenemos es claramente de recuperación si la comparamos con 2019, antes de la pandemia. El verano de 2022, que trajo un incremento de costes, dejó buenos resultados y este primer semestre ha sido muy bueno. También la planta hotelera ha hecho sus deberes y ofrece un mejor producto», explica Mayte García, secretaria general de Hosbec, al tiempo que pone como ejemplo de cifras récord a Valencia por el gran tirón entre los estadounidenses.
Detrás de ese 'boom' turístico, el mercado nacional, que vuelve a tirar con fuerza de la ocupación hotelera y las cifras récord de los aeropuertos de la Comunitat. En el caso del de Valencia, en julio logró el hito de superar la barrera histórica del millón de pasajeros en un mes, lo que se traducía en un incremento del 17,8% respecto al mismo mes del año pasado y, además, batir su anterior récord mensual, logrado este junio.
Una situación que se vive en otros medios de transporte. Por mar, el turismo de cruceros también se ha disparado, pasando de los 251.306 cruceristas del año pasado a los 378.213 en lo que va de año, de los que 100.660 pisaron la capital del Turia este julio.
En el caso del tren, el aumento de la oferta con la liberalización de la alta velocidad y los precios más asequibles de los billetes han hecho que la demanda se haya disparado. La plataforma Trainline cifraba en un 669% el incremento de viajeros para este verano en Valencia. Aunque las operadoras no facilitan las cifras de pasajeros transportados, sí que han detallado el volumen de plazas ofertadas para la alta velocidad en la Comunitat, ya que el corredor Valencia-Madrid y Madrid-Alicante es el único que está liberalizado. En concreto, un total de 2,21 millones de plazas son las que han puesto a la venta Renfe (AVE y Avlo), Iryo y Ouigo en julio y agosto en estos trayectos.
En el caso de Renfe, por ejemplo, estos dos meses circularán 1.965 trenes de alta velocidad entre Valencia y Madrid y otros 1.742 trenes entre Alicante y Madrid. Para la línea con Barcelona, las plazas ofertadas en julio y agosto ascienden a 280.424, de las que 33.310 son extra.
En el caso del transporte, ha influido también otro aspecto: los descuentos de hasta el 90% en los billetes de autobús y tren habilitados por el Ministerio de Transportes para los jóvenes este verano. Hasta 2,6 millones de viajes se han realizado entre el 15 de junio y el 15 de agosto y la ruta entre Madrid y Valencia es la segunda con mayor demanda.
Toda una cascada de números que ponen de relevancia el tirón turístico de la Comunitat pero que también arrojan una serie de sombras que arrastra el sector y que deberá encarar como retos de futuro. Dos de esas carencias están ligadas precisamente al transporte. Por un lado, la falta de taxis. Por otro, la ampliación del aeropuerto.
En el primer caso, basta con llegar a la estación Joaquín Sorolla o a la terminal de Manises para comprobar las colas de pasajeros que aguardan turno para subirse a un vehículo y que el número es insuficiente. Además, este mes circulan medio millar menos en la ciudad.
No sólo los usuarios lo advierten sino también la patronal de las VTC, que pide que se eliminen las restricciones sobre sus licencias, y Hosbec, que extiende la problemática a ciudades como Alicante y Elche. «Hay que adecuar los servicios de transporte, sobre todo de taxi, a la realidad de las ciudades en agosto, porque ya no están muertas en ese mes. Valencia ya no está desierta y eso es un problema que hay que resolver», asegura Alberto Galloso, director de Hosbec Valencia. Y añade la mejora de las conexiones de transporte, como el tranvía o el metro, entre el centro y la Marina.
Desde la Conselleria de Infraestructuras ya se trabaja en dar una solución a la falta de taxis y tiene previsto hablar con todos los sectores implicados y los municipios afectados para buscar soluciones, «siempre desde el diálogo con todos los actores», apuntan desde el departamento de Salomé Pradas.
Y, respecto al aeropuerto, un vistazo a redes sociales permite ver el malestar de muchos usuarios por la saturación de las instalaciones o las largas colas para embarcar. En este sentido, Galloso recuerda que el debate sobre la ampliación ya se planteó en 2018 cuando Manises lograba una marca histórica al superar en más de un millón los pasajeros de 2017 y alcanzar los 7,76 millones.
Ahora, teniendo en cuenta que cerró 2022 con 8,11 millones de usuarios y que este 2023 sigue batiendo récords, a su juicio, «hay que plantearse si se va a quedar pequeño». Sobre todo porque la capacidad actual, tras la ampliación que entró en servicio en 2012, es de 10,5 millones de pasajeros. Sobre esto, a comienzos de este año, el propio director del aeropuerto, Antonio García, aseguraba que prepara un nuevo plan director de Manises que podría incorporar esa ampliación.
A ello habría que sumar, según el presidente de Hosbec Valencia, la mejora de las conexiones con ciudades europeas, que considera «clave», porque «el crecimiento de una ciudad viene de la mano del aeropuerto.
Otra nube que se cierne sobre el sector es la carencia de mano de obra y, además, cualificada. De hecho, hay establecimientos que no asumen más carga de trabajo porque no saben si podrán afrontarla debido a que no encuentran personal, sobre todo en el ámbito de los congresos e incentivos, donde las previsiones para el último cuatrimestre son muy positivas.
«Es complicado encontrar trabajadores», reconoce Mayte García por la falta de estabilidad y atractivo de estas profesiones para la gente, sobre todo para jóvenes, de ahí la necesidad de mejorar la imagen del sector y la profesionalización y cualificación de los trabajadores. Aspecto en el que coinciden Javier Vallés, director general de SH Hoteles, y Víctor Tatay, director regional de Adecco en la Comunitat, quienes destacan que más que una cuestión de salarios es de expectativas y calidad de vida.
Camareros, cocineros, ayudantes de cocina o personal de pisos son los puestos más difíciles de cubrir. Y, aunque las ofertas publicadas han bajado un 10,6% respecto al año pasado, lo cierto es que tanto en hoteles como en apartamentos o alojamientos rurales ha crecido la plantilla respecto a julio de 2022. Por ejemplo, en hoteles ha pasado de 19.776 empleados a los 20.946, según el INE.
Transporte, mano de obra y licencias de apertura. Sólo en Valencia hay alrededor de 30 hoteles a la espera del visto bueno del Ayuntamiento, y en ocasiones también de la Generalitat, para obtener una licencia –tanto de obra nueva como de rehabilitación– debido a la demora que se acumula por la lentitud de la burocracia. Otra carencia que atajar para dar respuesta al turismo.
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