El debate de la sanidad que centra la campaña en Madrid capitaliza el discurso de Sánchez en Valencia

El mitin central del PSPV en Valencia, con Pedro Sánchez como gran invitado, ha comenzado con la intervención de Sandra Gómez, la candidata a la alcaldía de Valencia. Posteriormente, Puig se ha mostrado exultante en su balance de gestión en el Consell y sobre sus propuestas de futuro, para acabar el acto con la intervención del presidente del Gobierno central. Sánchez ha relatado que estaba recordando sus últimas visitas a la Comunitat. «En Alicante, donde nuestra candidata es Ana Barceló, la persona que se encargó de luchar contra la pandemia desde la Conselleria de Sanidad, hablamos Ximo y yo sobre cuál sería el mejor homenaje a las víctimas del virus, y coincidimos en que lo mejor que podemos hacer es fortalecer el sistema nacional público de salud, cuyo peor enemigo son los recortes», ha indicado Sánchez, quien ha recordado la gestión de Rajoy en tiempos de la crisis económica de la década pasada. Las referencias al PP en tiempos de la debacle financiera internacional y a la sanidad, el motor de la campaña en Madrid, han capitalizado el discurso del presidente del Gobierno, despegado de los asuntos en los que el propio Puig ha intentado centrar su campaña de reelección: las mejoras económicas registradas en la Comunitat y su deseo de apostar por la vivienda durante la próxima legislatura. Ni una palabra de financiación o vivienda, ni un guiño a la llegada de Volkswagen a la Comunitat.

Tiempo electoral de escaso rédito para Puig en lo que se suponía que era el mitin estrella de la campaña. Cierta sorpresa ante el discurso de Sánchez, mirando de la M-30 hacia dentro a pesar de estar ofreciendo su último discurso de campaña en una región donde los socialistas se juegan su principal feudo autonómico y las encuestas auguran un resultado muy igualado. Más de 4.000 personas han acudido al acto, en la Ciudad de las Artes y las Ciencias.

Sánchez ha iniciado su intervención muy enfocado en su gestión de defensa de los servicios públicos. «En el próximos Consejo de Ministros vamos a inyectar 580 millones de euros para modernizar los 13.000 centros de atención primaria de toda España, también de la Comunitat Valenciana», ha anunciado el líder del PSOE, que ha insistido en cotejar su gestión con la del PP durante los años de la crisis internacional que arrancó en 2008 y 2009.

Madrid ha servido como el ejemplo de la gestión privatizadora de los servicios públicos. El «dogma neoliberal» ha sido el eje de contraste en el discurso de Sánchez, que también se ha comparado con EEUU, al recordar que los americanos gastaron un 16% de su PIB en un sistema de sanidad donde la gestión privada tiene un gran peso «mientras que nosotros invertimos un 8% para tener una de las mejores sanidades gratuitas y públicas del mundo».

«La clase media recibe mucho más del Estado del Bienestar que lo que pagamos en impuestos, y eso es porque no queremos que alguien se arruine por someterse a un tratamiento contra el cáncer», ha indicado Sánchez, cuyo eje discursivo ha sido la sanidad, que es el centro de la batalla política en Madrid. El líder del PSOE ha defendido «la política útil del Gobierno de España», con el apoyo a la dependencia (aunque en la Comunitat el copago del Estado es de apenas el 13% respecto al 50% que debía ser por ley), con el refuerzo a las pensiones y, especialmente, en la inversión en Sanidad.

«Por eso estoy convencido de que seremos ganadores de las elecciones del 28 de mayo», ha concluido Sánchez, sin hacer ni una triste mención a la vivienda, el agua o la financiación, asuntos capitales en la agenda política valenciana durante esta campaña.

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