Una casa de comidas saludables en el barrio más multicultural de Valencia

El local se conoce como Santiyaki y Santi Latorre describe su oferta gastronómica como «comida diferente, con una línea saludable». No lleva mucho tiempo abierto, empezó el 1 de abril de 2022, pero en su cartera de clientes ha conseguido ganarse la fidelidad. «Hay gente que viene casi a diario, porque lo que ofrecemos es diferente», indica Latorre a LAS PROVINCIAS. El cliente fiel debe haber entrado por los ojos y se ha quedado por la el sabor y la variedad, porque Santi Latorre destaca que hay gente «que le gusta que sea comida saludable. El otro día un cliente me comentaba que se encontraba mejor después de comer un plato que se llevó».

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Entre la carta del cocinero para cada día hay platos muy diversos y diferentes a los de una casa de comidas habitual. Santi Latorre destaca un arroz 'asalvajado' salteado con especias, salsa de soja, pavo, huevo a baja temperatura y cilantro, entre otros ingredientes, así como un plato internacional con pollo, huevo revuelto, kimchi, salsa de soja y picante coreano. También tiene satai y, obviamente, «paella valenciana, de verdura y siempre hay un arroz de autor. Por ejemplo en septiembre tenía un arroz con morcilla e higos, que gustó mucho porque era ciertamente novedoso».

En esa carta que va variando, especialmente por temporadas, igual se encuentras un plato de pollo, setas y calabaza, que un gazpacho de sandía y albahaca o, ahora en invierno, una crema de champiñones con especias. En ese sentido, el cocinero en Ruzafa destaca el poke, «porque gusta mucho a los clientes, y el pollo cajún, que tiene buena acogida entre la gente joven, con ese toque picante».

Al final, lo que Santi Latorre intenta demostrar con su cocina es que «lo saludable no es plancha y hervido y que no es comida únicamente para adelgazar, porque en este caso debes tener una vida activa ya que va bien servida de hidratos de carbono. Lo importante es tener unos hábitos de vida saludable». Así que para alcanzar esa premisa el que fuera cocinero de uno de los hoteles con más fama de Valencia deja de lado «los aceites refinados, los aditivos y el azúcar añadido. todo lo que ofrezco es comida saludable», sentencia Santi Latorre.

En este negocio empezó casi de casualidad, tras años y años entre fogones de un hotel y probar fortuna en la cocina saludable durante la pandemia. Así que cuando tuvo que volver a su puesto de trabajo duró más bien poco, porque su futuro estaba en hacer otro tipo de cocina, en entrar por los ojos y ganarse al cliente con el estómago. «Cada ración es un plato equilibrado y suficiente, sin entrantes. Con un plato comes bien», sentencia el chef.

Es un local único en un barrio único de Valencia. Santi Latorre asume que «en otro barrio no tendría cabida y tampoco tan buena acogida». Así que aprovechando «ese punto a favor», el chef que entró en una cocina en la mili y ahora vende raciones saludables intenta demostrar cada día que otro tipo de comida para llevar es posible, que comer saludable es tan sencillo como pasarse por Ruzafa.