El templo del almuerzo de Algemesí que renace tras la dana

«Hemos arrancado muy rápido desde que reabrimos en febrero, estamos con el 90% de reservas. Estamos muy contentos porque queríamos que la gente volviera a disfrutar», explica Sergio Santamaría, cofundador de La Mesedora.

El camino hasta aquí no ha sido fácil. El agua arrasó con el local ubicado en el polígono industrial de Cotes en Algemesí, entrando más de un metro en el local, destrozando mesas, sillas y cámaras y dejando un triste rastro de barro. También afectó a los robots camareros tan característicos de este templo del almuerzo. Dora, uno de estos robots, permanece sucia de barro en la entrada como recuerdo de lo sucedido. Junto a ella una mecedora embarrada, unas botas de agua y una pala, símbolos de la dana.

«Durante los primeros doce días no podíamos ni pensar en el restaurante. Algemesí estaba destrozado y nos centramos en ayudar con recogida de alimentos, crear un albergue para voluntarios…», recuerda Sergio Santamaría cuya familia también sufrió las consecuencias de la riada.

A partir del día 13 tras la dana fue el momento de valorar la situación y ponerse a trabajar. Aunque hubo momentos en los que se pasó por la cabeza no continuar, debido a la magnitud de la tragedia y el cansancio por la situación vivida, los responsables de la Mesedora recuperaron el ánimo y empezaron de nuevo, para renacer y seguir siendo referente en la cultura del almuerzo.

«Una motivación extra también fue que al mes de la dana se propuso la apertura de un restaurante en el Roig Arena, esto también nos animó a seguir», comenta el cofundador de este negocio. Un nuevo reto para los responsables de la Mesdora que en cinco años han conseguido colocarse entre los bares más conocidos por sus almuerzos de toda la Comunitat. Y en unos meses también lo harán en la ciudad de Valencia al formar parte del nuevo pabellón deportivo.

Hace tan sólo unos días celebraban su quinto aniversario junto a sus clientes con una ruleta de la suerte con preguntas sobre la historia del restaurante. Y es que el espíritu de este bar se mantiene pese a la adversidad de los últimos meses, conseguir que la gente viva una experiencia diferente a través de las propuestas de sus bocadillos y de la puesta en escena de un restaurante muy vivo.

«Siempre estamos ideando cosas nuevas y vamos a participar de nuevo en el concurso al mejor bocadillo de España», adelante Sergio Santamaría. Además, se ha retomado la iniciativa del bocadillo del mes que funciona muy bien, proponiendo uno nuevo para que la gente pueda conocer nuevos sabores.