Una de las bodegas que en los últimos tiempos viene despuntando en Jumilla es Casa de la Ermita. A mi modo de ver, Jumilla ya lleva un tiempo siendo una de la denominaciones de origen de vinos españoles más de moda gracias al trabajo concienzudo de sus bodegas. La fama por la calidad de sus tintos ya hace tiempo que traspasó fronteras, pero en el último lustro brilla por su creatividad y por haber colaborado en poner en valor los vinos con carácter mediterráneo.
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Casa de la Ermita, con viñedos en el Parque Natural de la Sierra del Carche acaba de poner en el mercado un sofisticado vino rosado a base de la variedad francesa petit verdot. Esta es una variedad francesa típica de la región del Medoc francés utilizada en numerosos grandes vinos de Burdeos que se ha aclimatado a la perfección en las soleadas alturas jumillanas. De hecho son muchos los enólogos que afirman que esta se comporta mejor aquí que en su terruño originario. El vino llegó a Valencia esta misma semana y se cató. En copa muestra elegantes tonos rosáceos, sutiles y evocadores. Aromas frescos de fruta roja como fresa y frambuesa, pero también a flores, a jara... En boca, es frutal con postgusto largo de frutos rojos. Acidez fresca, viva, de paso suave y aterciopelado.
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