«No te cases», la llamada que empujó al torero Juan Ortega a plantar a su novia en el altar

La 'espantá' del altar de Juan Ortega se ha convertido en uno de los temás más sorprendentes, inesperados y comentados de los últimos meses. El torero iba a casarse por todo lo alto este sábado en Jerez de la Frontera con su novia desde hace más de una década, Carmen Otte, pero con todo preparado y a escasos minutos de darse el 'sí quiero', tomaba una drástica decisión: suspender la boda y 'huir' a su casa de Sevilla, donde se refugia y guarda silencio tras la 'faena' más controvertida de su vida.

Ahora se ha sabido, según ha revelado la periodista Pilar Vidal en el programa 'Y ahora Sonsoles', que el torero decidió hacer una llamada decisiva para transmitir sus dudas respecto a su boda.

Juan Ortega, de 33 años y profundas convicciones religiosas, llamó al cura que iba a oficiar la boda, un amigo suyo que se había trasladado expresamente desde Barcelona. El torero conversó con él para explicarle sus dudas sobre el matrimonio y contarle su intención de cancelar la boda. El cura le aconsejó que no se casase.

Más de 500 invitados esperaban ya para celebrar la boda, pero Juan Ortega no fue capaz de dar el paso. Tras hablar con el cura, el torero sevillano llamó a su prometida, que se encontraba en aquel momento ultimando los detalles de su peinado. La joven, cardióloga de profesión y tambien de 33 años de edad, no daba crédito. Por último, el diestro llamó también a sus padres.

Juan del Val fue uno de los muchos invitados que se quedaron en shock al enterarse de que la boda a la que iba a asistir junto a su mujer, Nuria Roca, se había cancelado en el último momento. «Nos dijeron que tenía dudas», comenzaba explicando el colaborador en el programa de este domingo de 'La Roca' sobre cómo se enteraron de que finalmente el enlace no se iba a celebrar. Al parecer cuando todos estaban ya listos para disfrutar de la boda les llegó la noticia, el novio tiene dudas «y no quiere terminar de dar ese paso».

El presentador asistía a la boda como amigo del novio y asegura no entender qué pudo sucederle en el último momento para dejar a su novia plantada de esta forma en el altar. «Nadie entendía la situación, él es un tipo enormemente íntegro», contaba.

Juan Ortega y su prometida llevaban diez años de relación y vivían juntos desde hace tres. Pocos en su entorno entienden las causas últimas de lo ocurrido. Lo que parece claro es que Ortega llevaba tiempo meditando cancelar la boda.

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