Malú ha sido la nueva invitada de Vicky Martín Berrocal a su podcast, 'A solas con...'. Ahí la cantante ha hablado a corazón abierto sobre su lado más personal y, además, ha desvelado el duro episodio de anorexia que tuvo que pasar y las malas decisiones que adoptó entonces para intentar que no saliera a la luz porque «hubiera sido un escándalo mediático».
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Durante la entrevista, la intérprete y la diseñadora han hablado sobre lo importante que es acudir a terapia para gestionar la ansiedad. «Al final, el que gestiona las emociones, el que gestiona los momentos de una pérdida, un fallecimiento... es éste», ha dicho Malú señalándose la cabeza, «y sólo le damos omega-3». «No está mal que nos den herramientas para gestionar las emociones, que es que nos destrozan», ha añadido.
«¿Tú hoy eres feliz?», le ha preguntado Vicky Martín Berrocal. «Estoy 're-feliz' y estoy en paz y muy bien conmigo misma«, ha dicho con una gran sonrisa en la cara. «Me gusto, me quiero, me antepongo, creo en mí y siento que soy una buena hija y una buena madre. Es la primera vez que me quiero en mis 42 años», ha sentenciado. «He necesitado 42 años para mirarme al espejo y decir 'tía, está bien, tú eres así, este es tu cuerpo, tu cara, tu piel, tu pelo...'. Soy una persona simpática, soy buena.. ¡ya está!», ha confesado a la diseñadora y a sus oyentes.
Y es que, Malú ha desvelado que «antes, a esa persona no la veía». «Era todo defectos, complejos y querer ser otra persona. Ves a tus amigas, a otras personas a tu alrededor con esos completos y les dices 'pero qué dices, ¿tú te estás viendo la cara qué guapa? Y tú estás haciendo lo mismo«, ha explicado. «Vivimos en un lugar en el que hay unos cánones y unas historias en las que si tú te sales te genera mucha historia en la cabeza», ha dicho Malú.
La cantante también ha hablado sobre cuáles son las cosas que ha hecho en la vida y de las que se arrepiente. «Para mí todo ha sido un aprendizaje. Yo no sería la que estoy aquí hoy si no hubiera cometido ciertos errores», ha comenzado a decir.
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En cuanto a la anorexia, Malú ha explicado que no la supo tratar como debería debido a su extensa agenda repleta de compromisos profesionales: «Hubiera sido un escándalo mediático y no queríamos que pasara...». «Trastornos de empezar a comer menos, de obsesión por la delgadez, por estar delgada, por estar físicamente como tenía que ser... Y se me fue bastante de las manos», ha reconocido.
«Yo seguía trabajando, seguía con mil cosas... No podía centrarme en eso, y eso estaba ahí, iba y venía, hasta que ya dejó de venir, hasta que un día dije: 'Ya está'», ha asegurado en un claro mensaje con la intención de ayudar a otras personas que hoy en día puedan estar atravesando lo mismo.«Estuve un montón de años con el sí y con el no. Quité todos los espejos y los pesos de mi casa para no ver constantemente mi imagen, cosa que es difícil porque te ves luego en otro sitio que no es el espejo», ha añadido. Poco después, un amigo suyo le recomendó acudir a un psiquiatra algo que, según ella misma ha confesado, le cambio la vida a mejor.
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