Catarroja recicla cerca de 450 toneladas de paja del arroz para evitar que se pudra en los campos
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Este año se ha recogido el residuo en los tancats más cercanos a la Albufera y no ha hecho falta utilizar los motores para sacar el agua·
Este año se ha recogido el residuo en los tancats más cercanos a la Albufera y no ha hecho falta utilizar los motores para sacar el aguaada dasí
Catarroja
Jueves, 29 de octubre 2020, 23:15
La experiencia del año pasado en Catarroja de recoger la paja sobrante de la cosecha del arroz que se queda en los campos del marjal salió tal y como se esperaba, y el agua retornó al lago de la Albufera, pasando por los motores, sin causar ningún perjuicio medio ambiental, como la falta de oxígeno que provoca la putrefacción de este sobrante y que ha causado una masiva mortandad de peces en temporadas pasadas.
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Por eso este año, y ante la prohibición de quemarla en el término que solo se permite en años alternos, la mayoría de productores se han sumado a esta iniciativa. Esto ha provocado que la cantidad recogida duplique la de la anterior cosecha, con cerca de 450.000 kilos, en mil hanegadas, destinadas al reciclaje.
Esta es la segunda vez que la Concejalía de Medio Ambiente, promueve esta iniciativa a través del Consell Agrari municipal. Su responsable, Elisa Gimeno explica que "la falta de lluvias de estos meses ha evitado que se tengan que poner en marcha los motores, como sí ocurrió la pasada temporada" y "nos ha permitido recoger la paja en los dos tancats más cercanos a la Albufera", además de en las partidas del Bony y Sèquia nova.
Los trabajos de empacar la paja han corrido a cargo de la licitación de la Conselleria de Agricultura y Medio Ambiente. "Hemos apostado por reducir el impacto de este residuo en los arrozales, como una buena práctica. Estamos muy contentos con los resultados y los agricultores han comprobado que es eficaz", añade Gimeno.
Estos trabajos se han hecho a tiempo, antes de embalsar los campos por la perellonà y la apertura de la veda de caza. Ahora, las balas empacadas serán utilizada por ganaderos locales como cama para sus animales, por labradores como acolchado en la huerta y campos de cultivo o también por arquitectos como materiales de bioconstrucción para levantar edificios, así como por muchos otros usuarios con proyectos interesantes que dan otra vida a este recurso y evitan utilizar materiales de un solo uso, como el plástico.
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