Tres valencianos permanecen atrapados desde hace semanas en Tailandia, Francia e Inglaterra

Ciudadanos de Beniparrell, Catarroja y Albal cuentan la experiencia que están viviendo durante la crisis sanitaria

ada dasí

Horta

Martes, 31 de marzo 2020, 13:06

Jóvenes y no tan jóvenes de la comarca de l'Horta han sido sorprendidos por la crisis sanitaria del Covid-19 lejos de sus hogares. Cada caso es un mundo aunque todos coinciden en la preocupación por sus familiares que están en sus respectivos municipios de origen y que gracias a la tecnología mantienen una comunicación diaria con ellos.

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En algunos casos es prioritario regresar, sobre todo para Mari Carmen Merino que necesita su medicación diaria para poder afrontar la enfermedad que padece ya que se ha quedado atrapada en un pueblo cerca de Nimes tras ir a visitar a su hijo días antes del cierre de fronteras.

En cambio, Marta Polit tiene claro que su prioridad es quedarse en Londres para evitar el peligro de un posible contagio a sus familiares de Catarroja. Las medidas restrictivas se han ido ampliando en el país a medida que avanzan los contagios por el coronavirus.

La situación de Pepe Dasí es más complicada. Llegó a Tailandia para aprender de la cocina autóctona y está a la espera de poder conseguir el visado de trabajo, una esperanza que puede verse truncada por la crisis sanitaria y el cierre de fronteras.

Los tres aseguran que los ciudadanos de estos países en los que residen están «más concienciados» que los españoles y que «siguen estrictamente las normas de higiene y confinamiento». Pepe confirma que «me siento más seguro aquí, a pesar de que es un país con menos recursos y desigualdad económica» pero la gente «va por la calle protegida con guantes y mascarilla», asegura.

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Mari Carmen también destaca la rigidez de las normas de confinamiento. «Aquí no puedes salir sin un papel de autorización». «Cuando vas a a comprar tienes que guardar el tique y tiene que ser de menos de una hora». «Tampoco puedes salir de dos en dos, hay que ir solo».

También el ser español es hoy en día una desventaja y casi un estigma. «Te miran mal y cuchichean entre ellos cuando me ven», comenta Mari Carmen. A Pepe le pasa igual, con el añadido de que en algunos países esta restringida la entrada para los de nacionalidad española.

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En cambio en Miami, Raquel Valiente hace una vida prácticamente normal. Va al trabajo y hace la compra como si no pasara nada, aunque siguiendo las recomendaciones de sus padres, que residen en Catarroja, se confina en casa con su familia todo lo que puede para evitar un posible contagio ante la flexibilidad de las directrices impuestas en Estados Unidos.

Pepe Dasí, Tailandia

«No sé si me van a poder expedir el visado de trabajo»

El problema para el joven de Beniparrell es que sigue con visado de turista y está pendiente de conseguir uno de trabajo en abril, aunque tal y cómo está la situación «dudo que me lo hagan». Por lo que tendrá que salir del país con la incertidumbre de si podrá volver de nuevo ya que otros como Corea o India han restringido el pasaporte español.

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Mari Carmen Merino, Francia

«Necesito mi medicación y no puedo volver a España»

Esta vecina de Albal se desplazó a casa su hijo, en un pueblo cercano a Nimes, el 12 de marzo y no ha podido volver . La situación se ha complicado ya que padece fibromialgia y no tiene acceso a la medicación porque necesita un justificante para poder salir de casa, «mi marido me la ha enviado por correo ordinario, pero todavía no me ha llegado».

Marta Polit, Inglaterra

«Me quedaré aquí, como ciudadana responsable»

Marta está en Londres donde trabaja como 'au pair', y ahí seguirá porque como señala «soy una ciudadana responsable y así evito cualquier contagio a mi familia, a pesar de dolerme en el alma no poder tenerlos cera de mi en esta situación tan complicada». En la ciudad, las medidas no son tan restrictivas, aunque los ciudadanos son más responsables.

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Raquel Valiente, Estados Unidos

«En Miami el confinamiento es voluntario»

Raquel tiene su residencia en Miami, donde el confinamiento es «voluntario». «Vamos a trabajar igual aunque cuando volvemos tomamos las medidas sanitarias adecuadas; lavamos la ropa, los zapatos y utilizamos gel». «Intentamos salir de casa lo menos posible, a hacer la compra y a trabajar. Aquí estamos pidiendo que cierren el estado de Florida».

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