Las inundaciones en edificios se extienden por l'Horta, Camp de Túria y Camp de Morvedre

Propietarios de viviendas en Albuixech y de la pedanía de Valencia, Mahuella, situada junto a esta misma localidad, han explicado a este periódico que viven desde hace dos meses la misma situación. Además, según comentan, son conocedores de más casos en Alboraya, Puçol, El Puig e incluso naves en Sagunto, municipios muy pegados también a la costa donde se ha experimentado un aumento del nivel freático desde las copiosas precipitaciones registradas en mayo.

David Márquez es arquitecto técnico y uno de los afectados de Mauella. Según un informe que obra en su poder el nivel freático ha subido cuatro metros este año, pasando de los 6 de 2018 a los dos metros actuales, por lo que el problema «se extendería a 150 kilómetros cuadrados, desde Sagunto a Valencia, teniendo en cuenta la distancia que les separa y la de la costa», como señala.

Márquez ha estado midiendo los cambios de nivel en su sótano, que tiene tres palmos de agua y asegura que en determinados días aumenta, coincidiendo con el caudal de la Real Acequia de Moncada, como también apuntan afectados de otros municipios como Massamagrell, La Pobla o Meliana, aunque desde el entidad niegan tener responsabilidad en las filtraciones. Tras ser conscientes de que la mayoría se enfrenta al mismo problema, los vecinos de Albuixech han constituido una plataforma con el fin de buscar una solución que acabe con estas inundaciones y conseguir que se declare como zona catastrófica, una cuestión que pueden solicitar los ayuntamientos y las comunidades autónomas ante el Gobierno central.

Y es que, como señalan, ni los seguros de las viviendas ni de las comunidades quieren hacerse cargo, ni tampoco el consorcio al tratarse de causas de la naturaleza y «ya estamos asumiendo el coste de las bombas y de sacar el agua», advierten. Además, tienen previsto pedir al consistorio de Albuixech un estudio geotécnico para determinar si las causas se deben al aumento del nivel freático.

Los afectados también piensan reunirse con el alcalde y llevar sus reivindicaciones a la Conselleria de Obras Públicas y Urbanismo, y a la Diputación de Valencia ante el grave problema al que tienen qe hacer frente si las filtraciones hacen mella en la estructura de las edificaciones, que es lo que más les preocupa, además de los daños materiales causados en trasteros y viviendas, junto con los problemas de humedades. El desencadenante que todos apuntan como común es el episodio de lluvias del pasado mes de mayo y el mayor problema al que se enfrentan es que los seguros no asumen el coste de las reparaciones ni tampoco el consorcio. En esta línea señalan que «si la licencia de construcción se otorgó por el Ayuntamiento tenían que haberse asegurado de que no era zona inundable».

Las imágenes son las mismas que se repiten en los sótanos de Massalfassar, Massamagrell, La Pobla y Meliana en la misma comarca, y fuera de ella en Bétera, chorros de agua saliendo de agujeros en las paredes sin posibilidad de pararlos, garajes inundados, sótanos que parecen piscinas, ascensores sin servicio, bombas de extracción y camiones de bomberos sacando el agua de estos recintos que a los pocos días vuelven a estar igual.

En los adosados de la calle Pau sacaron hasta 3.000 litros de agua del garaje y en una de las viviendas «las habitaciones de abajo están llenas de moho y el salón que está a pie de calle también tiene manchas de humedad», comenta su propietaria. En el bloque de la calle Aurora Casas número 3 la situación es similar «tenemos la humedad que llega casi al techo y saliendo en moho por la parte de abajo», comentan los afectados.

También propietarios de una vivienda de la calle Gamba, señalan que la compraron en 2007 y que una vez con las llaves en la mano comprobaron que el sótano tenía unos 20 centímetros de agua. «Ganamos el juicio contra la constructora pero no impermeabilizaron y tuvimos que hacerlo los vecinos hace tres veranos. A día de hoy aún tenemos problemas localizados en trasteros y garajes», señalan.

Muy cerca de Albuixech, en Mauhella se viven situaciones similares. Allí en una vivienda unifamiliar el sótano sigue con tres palmos de agua y han tenido que sacarla con bombas de achique.

Este lunes, también en l'Horta Nord, se ha cerrado al tráfico el túnel de acceso desde Rafelbunyol a la La Pobla de Farnals por la avenida España por una avería en la bomba de extracción del agua. El caudal que lleva es tal que incluso circula por las redes un vídeo con jóvenes tirándose de cabeza al agua.