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El alcalde de Albal, José Miguel Ferris, anunció este lunes una propuesta a la empresa estatal Adif para realizar unas obras de ampliación de un colector que pasa por debajo de las líneas ferroviarias, con el fin de garantizar una mejor respuesta en caso de que se repitan inundaciones en el municipio. El consistorio se enfrenta a una ardua tarea de reconstrucción los próximos años tras la dana del pasado 29 de octubre y uno de los aspectos que se quieren mejorar sustancialmente es todo lo referido a la red de saneamiento.
Ferris habló de la necesidad de ampliar la capacidad de desagüe del colector, aunque para ello necesariamente hay que modificar la infraestructura que discurre por debajo de las vías. Precisamente hace escasas fechas se inauguró la nueva estación de Albal, tras unas obras que se han prolongado desde hace cinco años. Fue el pasado 11 de febrero, para una intervención que ha costado 6,7 millones y por donde pasan 74 trenes al día de las líneas C-1 y C-2 de Renfe.
Ese es uno de los puntos críticas en la reconstrucción de la red. «El saneamiento ha tenido siempre en Albal un mantenimiento bastante adecuado, con lo que funciona a niveles aceptables dadas las circunstancias». Tras la inundación inicial y la eliminación de todos los arrastres por la dana, el reciente episodio de alertas meteorológicas y tormentas se llevó con relativa calma por ese motivo. En otros municipios de l'Horta, se habla de que la reparación de la red debe abarcar más de la mitad de la red de alcantarillado, lo que garantiza varios años de obras levantadas.
«Seguimos haciendo una obra también relacionada con el Ciclo Integral del Agua en el casco antiguo, que al final no ha sido afectada por la dana, pero hay que ir, pues eso, renovando las tuberías para que el pueblo desagüe mejor», comentó el primer edil, para insistir en que el «gran problema de cara al futuro es cómo desagua el pueblo. Lo hacemos por debajo de la vía del tren y claro, esos desagües estaban planteados cuando se hicieron esas vías pero no son las mismas circunstancias de hoy en día, con lo grande que se ha hecho el pueblo y a los niveles que está lloviendo en los últimos años».
Todo el caudal de ese colector sigue hacia el término de Catarroja para dirigirse después a la Albufera. «Deberíamos pedir permiso a Adif, que nos diera el permiso y es posible que entrara con la propia subvención», en referencia a los fondos del Gobierno para la reconstrucción del municipio, que ascienden a unos 31 millones de euros.
Esta cuestión se planteará también a los comisionados para la reconstrucción, con el fin de que se pueda incluir en la agenda de proyectos para los próximos años. Esta misma semana se celebrará alguna reunión y en ese foro se hablará de la cuestión.
Obviamente, la clave pasa por realizar las obras sin afectar lo más mínimo al tráfico ferroviario. Por esa estación pasan trenes que llevan 52.000 pasajeros cada día de media y conecta Valencia y el resto de la comarca de l'Horta con La Costera, La Safor y La Ribera.
La propia estación es fruto de un convenio entre Adif y el Ayuntamiento de Albal. La empres estatal aportó el 57% de coste estimado de la inversión y el Consistorio se hizo cargo del 43% del presupuesto de la obra y del 100% de las expropiaciones.
Otra cuestión a la que se refirió el primer edil sobre esta zona es la necesidad de mejorar la conexión entre la estación y el casco urbano, al indicar que impulsará un proyecto para dotar el itinerario de aceras, alumbrado público y otras infraestructuras que hagan más cómodo y seguro el recorrido. La estación de Albal ha ayudado a descongestionar las de Silla y Catarroja, aunque se considera que existe mucho margen de aumento en la afluencia de viajeros debido a que el municipio tiene suelo urbanizable por desarrollar los próximos años.
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