Un rompecabezas para Julián Calero. El de Parla afronta su primer bache como entrenador del Levante, ya que la sequía goleadora ha desembocado en tres jornadas consecutivas sin conocer la victoria. El equipo, que ha caído de la primera a la novena posición a ... la espera del resultado que obtenga el lunes el Burgos, encara una semana especialmente exigente. Los granotas recibirá al Deportivo el jueves y visitarán al Granada el domingo. El preparador azulgrana, obligado a comprobar el fondo de armario de la plantilla, se ha quedado sin mediocentros defensivos para la cita con el conjunto coruñés. A las lesiones musculares de Vicente Iborra y Ángel Algobia, se suma la sanción de un Oriol Rey que vio la quinta amarilla frente al Castellón. Una inoportuna tarjeta que escoció al técnico.
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Calero lamenta que, en las dos últimas jornadas de Liga, Oriol Rey haya visto la cuarta y la quinta tarjeta por diferentes protestas. «Tal y como está el equipo, lo había hablado con él durante la semana. Le había dicho que tenía que aguantar como fuera porque ahí andamos justos. Si aguantaba un poquito nos echaba una mano. Pues nos quedamos ahí un poco más escasos, pero entra en la normalidad del juego. Estás a unas pulsaciones muy altas. Me fastidia muchísimos porque esas cosas son muy evitables, pero he sido jugador y también he tenido un carácter muy fuerte y entiendo que a veces te pasa aunque no quieras y aunque esté hablado», explicó el entrenador del Levante después de la derrota frente al Castellón.
De esta forma, frente al Deportivo, Calero deberá asignar el rol de pivote a Giorgi Kochorashvili. El georgiano aprovechará su condición de todoterreno. El resto de centrocampistas, Pablo Martínez, Sergio Lozano, Carlos Álvarez y Óscar Clemente, poseen una vocación más ofensiva. La de Oriol Rey se suma a las bajas por lesión de Iborra, Algobia, Pampín, Cabello y Brugui.
Iborra se tuvo que retirar a los 11 minutos de juego durante el partido contra el Racing de Santander. El de Moncada padece una fascitis plantar. Ángel Algobia, por su parte, sigue sin arrancar. El centrocampista madrileño, quien sólo suma 72 minutos en lo que va de temporada, planeaba reaparecer ante el Castellón. El miércoles volvió a ejercitarse con el grupo tras recuperarse de las molestias que le habían obligado a realizar trabajo específico, pero la alegría duró poquísimo. Un nuevo contratiempo físico le dejó fuera de la convocatoria y también está descartado para los duelos con el Deportivo y el Granada.
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El Levante necesita recuperar las sensaciones positivas después de encadenar tres jornadas sin ganar. «Vamos a andar muy justos de gente, pero seguro que salimos con once e intentaremos competir. Mi labor es rearmar el equipo. No vamos a hacer un drama porque yo no hago una fiesta cuando gano», avisó Calero.
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