Correa remueve la mística de la portería Sur de Orriols

El fallo de un habilidoso futbolista como es Ángel Correa ante el Levante durante el partido liguero de anoche parece inexplicable. A pocos metros de la portería de Aitor Fernández, con este batido en el suelo, y con todo de cara para anotar. El atacante del Atlético de Madrid envió la pelota a la grada y el empate se mantuvo hasta el final. Un grosero error como este recuerda a uno similar que tuvo el futbolista portugués del Málaga, Duda, hace dieciséis años también en la portería Sur. Sin embargo, Duda sí encontró una explicación, relativamente convincente.

El malaguista justificó su falta de acierto afirmando haber visto un fantasma cuando se encontraba en la misma posición de privilegio que Correa anoche. Duda pasó la pelota a un compañero en vez de rematar a una portería que parecía vacía aunque según el jugador portugués estaba ocupada. La jugada del año 2005 trascendió hasta el punto de que el programa de Iker Jiménez 'La Nave del Misterio' llegó a tratar el caso. El Levante salió al paso viendo el revuelo que había causado la acción y contó que las cenizas de cuatro aficionados granotas que habían fallecido en un accidente de coche habían sido arrojadas al área de la portería Sur.

El otro protagonista de la acción del Levante-Atlético fue Aitor Fernández, quien se refirió a la jugada de una manera menos mística y más deportiva en declaraciones al club. «Una vez meto la mano al remate de Luis Suárez, veo que Correa la tiene franca para marcar y por suerte no entró y pudimos sumar. Me parece una ocasión clarísima», explicó el guardameta.