Morales se alista al crecimiento del Levante

Tras el apasionante pase a semifinales de la Copa del Rey, José Luis Morales permaneció en solitario sobre el césped del Ciutat de València. Fueron unos instantes durante los que su cabeza y su corazón se revolucionaron. Sentimientos enfrentados. No pudo contener las lágrimas. Se las limpiaba mientras algunos compañeros de vestuario se acercaban para consolarle. En esos momentos, entrelazándose con la euforia de la histórica clasificación, afloraba en el interior del Comandante la aflicción por la indefinición de su destino. La renovación contractual se había torcido por ciertas diferencias con el club. Numerosos aspirantes a ficharle de cara a la próxima temporada habían estado llamando a su puerta durante las últimas semanas. Una situación desconcertante alrededor del emblemático futbolista. Así, unas horas después de la conmovedora imagen del capitán granota en Orriols, el presidente de la entidad, Quico Catalán, decidió poner fin al angustioso asunto. Por la noche, más bien de madrugada, descolgó el teléfono con tal de desbloquear una negociación que quedó resuelta el jueves. Ayer por la mañana, sin más dilación, se produjo la anhelada rúbrica. El extremo madrileño, leyenda viva del equipo, continuará vistiendo la camiseta azulgrana, al menos, hasta 2023.

Morales afrontará la ida de las semifinales de Copa habiendo renovado y cerrando un círculo. El sorteo de ayer emparejó al Levante con el Athletic en la ilusionante eliminatoria, celebrándose el partido de ida en San Mamés. Precisamente, el mismo estadio que albergó el debut del Comandante con el primer equipo granota. El 30 de agosto de 2014, el madrileño formó parte del once titular y dejó muestras de su capacidad para desequilibrar.

San Mamés trae buenos recuerdos a Morales, quien espera sumar otro el próximo jueves en el partido de ida. En el estadio bilbaíno, el Comandante fabricó uno de los mejores goles de su carrera. Fue en la victoria por 1-3 lograda el 23 de abril de 2018. El extremo recorrió el campo zafándose de todos los rivales que se cruzaron en su camino y redondeó el triunfo en el minuto 90.

La próxima semana, Morales tratará de volver a brillar en San Mamés. Atraviesa un estado de forma sensacional y, ante el Villarreal, asistió a Roger en el último minuto de la prórroga para lograr el pase a semifinales. La renovación del Comandante, que se había atascado de manera preocupante, ya es una realidad.

El pasado mes de septiembre, Morales y el Levante habían dado el visto bueno a un contrato prácticamente vitalicio, que se prolongaría año a año siempre que el jugador se viese en condiciones de ofrecer un rendimiento satisfactorio. Faltaba la firma. Sin embargo, el capitán azulgrana comenzó a albergar dudas sobre su rol dentro del equipo. Algunas suplencias en diciembre le llevaron a frenar la renovación. Entendía que, si su protagonismo iba decayendo, su futuro en Orriols se complicaría.

En este punto, Morales renunció al anterior planteamiento contractual y reclamó al club una renovación por unos años fijos con unos emolumentos superiores. El Levante se mostró reticente a aceptar tales condiciones y el madrileño, quien terminaba contrato el 30 de junio, comenzó a recibir la llamadas de numerosos clubes españoles y extranjeros.

Después de varias semanas de inquietud, el pasado jueves Quico Catalán dio un golpe sobre la mesa y cerró el acuerdo. Morales amplía su contrato hasta 2023 con opción a otro año. Para cumplir esa tercera temporada, el futbolista deberá disputar 50 partidos oficiales (se contabilizarán aquellos en los juegue más de 45 minutos) durante las dos próximas campañas o 25 encuentros sólo en la segunda. Su sueldo pasa de 1,5 millones brutos aproximadamente a más de dos, situándose en el segundo escalón salarial de la plantilla. Su cláusula de rescisión se mantiene en 30 millones.

El entrenador granota, Paco López, celebró el acuerdo. «Morales le había dado mucho al club y el club le había dado mucho a Morales y estaban condenados a entenderse». El Comandante se mostraba pletórico. «Han sido días complicados, días duros, pero estoy contentísimo de renovar y seguir ligado al club. Considero que es mi casa, me lo han dado todo y qué menos que seguir aquí al menos un par de años más», afirmó en declaraciones facilitadas por el club. Y avisó: «Vamos a ponerlo todo para intentar pasar a esa final. Sabemos que va a ser muy complicado, pero estamos con mucha ilusión y muchas ganas».