Problemas para Calero en el peor escenario posible

Este contexto es un mazazo para el técnico granota, ya que, teniendo en cuenta el plan de partido tan dinámico que tratarán de imponer los locales, siempre es importante tener a un jugador como el georgiano que imponga su poderío físico en el medio. Suerte que no han perdido también a Carlos Álvarez, que está a un nivel pletórico, pese a sus pequeñas molestias.

A esto se le suman las recientes lesiones tanto de Pampín como de Algobia, hace menos de una semana, y se prevé que al menos el lateral izquierdo esté alejado de los terrenos de juego durante un tiempo. Lo del pivote es menos grave, por lo tanto, se reincorporará pronto.

Todo apunta a que para el duelo en El Sardinero será Vicente Iborra el que entre en lugar de Kochorashvili, con Marcos Navarro en el lugar de Pampín, sin descartar que sea Cabello el lateral y juegue Dela en el eje de la zaga.

El Racing de Santander le tiene cogida la medida al Levante, al menos históricamente, ya que los números indican que de los trece enfrentamientos que ha habido entre los dos clubes, solo dos han caído del lado de los de Orriols, con cinco empates y seis victorias para los racinguistas. Sin embargo, el decimocuarto será otra historia, ya que llegan en condiciones similares.

Todas estas situaciones no invitan al optimismo, sin embargo, sí que hay un aspecto al que agarrarse: los locales no tienen un registro muy favorable en su casa, con una única victoria, dos empates y una derrota. Son el decimotercer mejor anfitrión de la Segunda División. En cambio, los levantinistas, cuando marchan lejos de su feudo, se encuentran entre los seis primeros visitantes de la categoría de plata, dejando unos números de dos victorias, un empate y una derrota.

Pero, pese a lo que marcan los números, los granotas llegan a este partido con el mal sabor de boca que les dejó el empate ante el Real Oviedo la semana pasada. Javi Calleja propuso un partido cerrado, donde las ocasiones escasearon en ambas áreas, y pese a una retahíla de cambios, los levantinistas no fueron capaces de darle velocidad a la circulación de la pelota ni de crear ocasiones claras de gol.

No obstante, el escenario en este partido va a ser totalmente abierto. Como ya dijo Calero, el Racing tiene jugadores rápidos por las bandas, pero sabe combinar bien por dentro, por lo que si el partido se descontrola, se puede convertir en un constante intercambio de golpes entre ambos equipos.

«Nosotros no vamos a ser un equipo que vaya a esperar a que venga el partido, vamos a ir a por él. Va a ser igualado, somos equipos dinámicos, y suelen pasar cosas entretenidas. Pensaba lo mismo la semana pasada, nosotros intentamos y el Oviedo nos contrarrestó, y no consiguió salir el fútbol», afirmó en la previa el técnico levantinista, que sabe que una victoria sería clave para el Levante, que dormiría en puestos de ascenso directo.