Segundas partes nunca fueron buenas

La plantilla de este nefasto inicio de temporada es la misma que alcanzó ese hito copero, junto con las incorporaciones de actores de reparto como Soldado o Franquesa, que ni se han ganado el puesto ni han hecho méritos para ello cuando han tenido la oportunidad. El único que no quiso continuar de la primera película fue Rochina, que ha sido sustituido de gran manera por Pepelu en su confirmación como jugador del primer equipo.

La estadística es conocida por todos. 26 partidos consecutivos, desde el 10 de abril, sin ganar. El año termina para el Levante pero la situación es crítica. Es colista al haber logrado solo 8 puntos en esta Liga con 19 goles marcados, y eso que no ha sido capaz de ganar partidos a pesar de marcar tres goles en cuatro ocasiones: el 3-3 con el Real Madrid, el 5-3 contra el Sevilla, el 4-3 frente al Espanyol y el reciente 3-4 ante en el derbi ante el Valencia.

Pero otro dato demoledor es el de las segundas mitades de los partidos. Porque es que para este Levante, ninguna segunda parte es buena. Ya en la primera jornada sucedió. En Cádiz se marchó 0-1 al descanso. El Pacha Espino terminó empatando en el 97', tirando dos puntos por la borda. En la cuarta jornada en Orriols ante el Rayo ganaba 1-0 al descanso. La misma historia. Sergi Guardiola empató en el 92'. Ya son cuatro puntos perdidos. Aunque no sirva de consuelo, esos partidos terminaron empate. La historia de las segundas partes del Levante cuando llega con ventaja al descanso es una película de terror.

Ante el Alavés se marchó 0-1 al término del primer tiempo. Un doblete de Joselu en los últimos veinte minutos, con la puntilla del segundo en el 91' hundieron al Levante en Vitoria. Ya van siete puntos perdidos. Pero el descalabro no termina. Frente al Betis, Mustafi permitió irse 0-1 al descanso. El hat-trick de Juanmi en la segunda parte tumbó a los granotas. Ya son diez puntos perdidos.

¿Lo ven, no? Ante el Espanyol, el mismo villano volvió. Ventaja de 1-2 tras la primera parte. Los pericos le dieron la vuelta y el Levante perdió otros tres puntos que parecían encarrilados. Trece puntos van ya. La estocada final del derbi ante el Valencia, puede haber sido definitiva. Guedes recortó distancias y el descanso llegó con un 2-1 en el marcador. El resultado imagino que ya lo saben. La sangría de las segundas partes asciende a 16 puntos perdidos.