La tempranera crisis de Nafti

De esta forma, Nafti sabe que urge una reacción. El preparador del Levante es consciente de que el próximo partido, frente al Racing de Santander, debe dar un golpe de timón y cambiar el rumbo del equipo con tal de reforzar su crédito. Cabe recordar que su fichaje fue una apuesta de Felipe Miñambres, el director deportivo que aterrizó en Orriols el pasado mes de febrero.

El Levante está teniendo serios problemas para encontrar una identidad. Cuesta reconocer el estilo futbolístico del equipo. Desde que arrancó la campaña, Nafti ha realizado diferentes pruebas. Mueve las piezas con el objetivo de encajarlas de la forma más eficiente posible. Abandonó la defensa de tres centrales con la que trabajó en pretemporada y en las primeras jornadas para implantar un esquema de 4-2-3-1. También ha buscado la manera de juntar sobre el césped a Iborra y Pepelu sin que se solapen sus papeles. Y ha probado múltiples combinaciones en ataque con el propósito de conseguir la pólvora que escasea.

Sin embargo, de momento, las sensaciones son inquietantes. Juego espeso y resultados nada convincentes. El equipo tiene dificultades para hallar el camino del gol. Falta precisión en los metros finales y contundencia en el remate. Y la seguridad defensiva a la que Nafti dio prioridad desde el principio, se está desvaneciendo en las últimas jornadas.

Nafti necesita una reacción. De ahí que esté subrayado en rojo el partido del domingo ante el Racing, penúltimo de la clasificación con cinco puntos. "Mi puesto está cuestionado desde mi fichaje. Todo se demuestra en el campo. Sé cómo funciona esto. En los momentos duros hay que tragar. Y trabajar. No conozco otro remedio. Cualquier palabra ahora mismo se me va a volver en contra", reconoció el técnico tras la derrota ante el Andorra. Hizo autocrítica: "El Andorra no puede tener más pegada que el Levante. Es fallo mío por no poner a los jugadores en las mejores condiciones para finalizar una jugada. Mis jugadores ganan, yo pierdo. Tragar y trabajar". Y lanzó un aviso: "Pido perdón por la derrota y digo que vamos a trabajar. Nosotros, desde dentro, no vamos a abandonar".

Ayer, a través de las redes sociales, Pepelu envió un mensaje de esperanza. "Lo bueno no surge de lo fácil, los resultados no son cuestión de días o de horas. El camino no se recorre en un solo paso", afirmó el dianense.