El tren hacia el ascenso parte desde Orriols

El propio técnico levantinista ya ha advertido en los días previos que «no hay que confundir confianza con estar confiados». En el bando azulgrana son conscientes de la importancia de este próximo choque y no quieren caer en los errores del pasado donde, sin ir más lejos, ante el Racing de Ferrol, penúltimo clasificado, se sufrió el primer tropiezo en el Ciutat de Valencia, en lo que supuso un nuevo revés y oportunidad desaprovechada para dar un salto notorio de cara al objetivo. Esto quiere darse por zanjado.

Se acerca ese tramo psicológico de las últimas diez jornadas de liga. Por esta razón, no están permitidos más tropiezos y sí hacerse fuertes en casa, como ya se demostró hace dos fines de semana frente al Mirandés, que pasa por ser una de las claves.

Para el Levante es un partido en el que además podrá tener a casi todos sus futbolistas a disposición. Manu Sánchez se confirma como la única baja del encuentro, debido a una lesión en el recto femoral de la pierna izquierda, que le hará perderse al menos este encuentro y el siguiente. Quien sí ha vuelto a la lista de convocados es uno de los capitanes granotas, Pablo Martínez. Tras dejar atrás un percance muscular e incluso acortar los plazos que estimaba el técnico, ha completado las últimas sesiones de entrenamiento y, si bien no está todavía al cien por cien, sí apunta a reaparecer durante el segundo tiempo con algunos minutos.

Quien ya regresó en Elda fue Brugui. Y para dejar buen sabor de boca, se encargó de poner su rúbrica en el primero de los goles de la anterior jornada. Precisamente, el extremo catalán es una de las incógnitas y decisiones pendientes de cara al once inicial por el que apueste el Levante. Los otros nombres propios son los de Carlos Espí, el segundo anotador, y Dela, que regresa tras cumplir el castigo por la expulsión vista frente al Mirandés. Sin embargo, por precedentes, características del rival y ensayos a lo largo de la semana, tanto Ignasi Miquel como Morales e Iván Romero postulan a mantenerse como titulares.

El Cartagena, que ya en la pasada jornada vio cómo contaba con poco respaldo de su público en el estadio de Cartagonova, prácticamente ya asume el descenso, aunque este no sea matemático. Para evitarlo, tendrían que ganar casi la totalidad de sus partidos y esperar a que otros equipos situados por encima suyo no entren en buena dinámica, ya que actualmente parte con 21 puntos de desventaja.

El centrocampista Luis Muñoz se confirma como la única ausencia por lesión del equipo cartagenero, mientras que Musto y Alcalá regresarán a la convocatoria, incluso con aspiraciones de contar con la confianza inicial de su entrenador Fernández Romo.