La Festa del Batre de Jesús Pobre pone en valor las cocas tradicionales

Empieza el verano y llega el momento de cosechar el trigo que el proyecto Blat de la Marina ha cultivado con mimo para recuperar las variedades autóctonas. Eso ocurrirá a principios de julio y después se procederá a separar el grano de la paja. Esa trilla tiene su punto culminante en Jesús Pobre con una fiesta, la denominada Festa del Batre. Este año alcanza su novena edición y en ella se ha decidido poner en valor las cocas tradicionales.

La era del Riurau de Jesús Pobre acogerá el próximo 9 de julio la IX Festa del Batre y la I Fira de la Coca Tradicional. Pep Romany, cocinero y miembro del proyecto Blat de la Marina, ha explicado durante la presentación del evento que una empezada la recuperación del trigo de las semillas tradicionales se plantearon qué podían hacer con el grano obtenido. Se dio el paso de molerlo y la salida más lógica para esa harina era vinculara a panes y cocas, dos productos tradicionales.

Una mezcla de elementos tan sencillos como la harina, el aceite, el agua, la sal y levadura pueden convertirse en distintos productos en función de las proporciones que se utilicen, el tiempo de fermentación y el método usado para cocinar esa masa. Uno de ellos es la coca tradicional, que para Romany supone una “expresión del territorio perfecta” y que refleja la diversidad a través las masas y salazones, embutidos o verduras con los que se combina y que permiten una gran “creatividad”.

En cuanto a la feria que se celebrará junto con la Festa del Batre, el cocinero ha señalado que no buscaban una competición o concurso, sino que preferían que fuera una plataforma en la que se mostraran todas las expresiones de la coca. Y, según ha relatado, pensaron que Jesús Pobre era el lugar idóneo al ser el corazón del proyecto del Blat a la Marina y también el “corazón del valle del Montgó”.

Además ha puesto de relieve que las primeras referencia escritas a las cocas se remontan al año 1627. Un recibo que conserva Dénia, atesorado en su archivo municipal, recoge los datos de los gastos del menú de la visita a la Cova Tallada del abogado de la ciudad. Allí se puede leer escrito en valenciano 'per dos arrobes de farina per a pa y coques lo dia que se anà a la cova Tallada en lo doctor Florcadell'.

Para el evento del 9 de julio se han decantado por centrarse en las cocas de 'pasta bona' al horno. Es decir, hechas con levadura y que se dejan fermentar. Además habrá una parada de cocas fritas.

Josep Gordillo, de la Farinera de la Marina, ha comentado en que la feria se podrán descubrir las diferentes formas en las que se elaboran en cada localidad. En esta primera cita participarán una decena de hornos y restaurantes de seis puntos de la comarca. En el riurau habrá puestos de Dénia, Xàbia, Orba, Gata, La Xara y Jesús Pobre con productos elaborado con harinas de la Farinera.

También ha destacado que las cocas son una propuesta con “gran potencial” a la que a nivel gastronómico no se le ha dado la importancia que merece hasta que Pep Romany puso en marcha su Nyas Coca en Dénia. De esta primera edición de la feria espera que sea todo un éxito y que tenga continuidad.

El coordinador de la Festa del Batre, Carles Hostalet, ha sido el encargado de detallar la programación del evento promovido por la Associació Cultural del Riurau. Un colectivo que ha puesto en marcha los proyectos del Mercat del Riurau y Blat de la Marina. A las 19 horas tendrá lugar una performance en la era en la que se mostrará el proceso de la separación de la paja del grano como se hacía antaño, para el que contarán con la ayuda de los animales de Amics dels Cavalls de Gata de Gorgos. Una trilla que se realizará al ritmo de los 'cants del batre' que se cantarán para amenizar el trabajo.

La programación continuará con un taller, a las 20.30 horas, de Jesús Machi, prestigioso panadero de Valencia y gran defensor de la masa madre. El colofón lo pondrá un concierto de folk valenciano a cargo de Josep Aparicio 'Apa' y su grupo Citra, que actuarán a las 22.30 horas.

El alcalde de Jesús Pobre, Javier Scotto, ha remarcado el orgullo que supone que el riurau acoja esta fiesta y también la feria del legado gastronómico del Mediterráneo, con el trigo, la harina, las masas y unos panaderos que transmitirán a los asistentes sus conocimientos para que continúe pasando este legado a otra generación. Asimismo, ha afirmado que “contar con vino, aceite y trigo, presentes en nuestra comarca, es atesorar la Santísima Trinidad de la alimentación”.

Por su parte, el concejal de Cultura de Jesús Pobre, Josep Fornés ha puesto de relieve que esta iniciativa persigue cambiar el modelo turístico. Con la incorporación de la feria se complementa esta propuesta. Según ha dicho, además de abordar el sector primario, también se apuesta por el secundario para impulsar en la comarca que, además de crear la materia prima que es el trigo, se apueste por su transformación.

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