Ribera y el comité de empresa de Marina Salud acercan posturas para mejorar el convenio laboral

Parece que se avecinan mejoras para el personal del Hospital de Dénia y de los centros de salud de la comarca. Después de meses sin avances en las negociaciones para mejorar el convenio laboral, el grupo Ribera y el comité de empresa de Marina Salud han acercado posturas este jueves.

El nuevo presidente del comité, Joan Sarrió, ha calificado de “productiva” la reunión que han mantenido este mediodía. Las condiciones que les han trasladado desde la empresa concesionaria suponen una mejoría en cuanto a la anterior propuesta. Antes les ofrecían un aumento salarial de 1,5% este año y de un 2% en 2023, además de exención de guardias para mayores de 55 años y permisos de conciliación condicionados.

Sin embargo, Sarrió se ha mostrado cauteloso y ha preferido no avanzar las cifras concretas. No obstante, ha reconocido que suponen un incremento. Cabe recordar que el primer convenio laboral del personal de Marina Salud data de 2014 y estuvo vigente un año. Desde entonces, al no disponer de un segundo documento marco que sustituyera al anterior, se han mantenido las condiciones de aquella época.

Pero eso puede cambiar pronto. La presión política y, sobre todo, los tres días de huelga del personal sanitario a principios del pasado mes pueden tener parte de culpa de que las posturas hayan variado y comience ese acercamiento encaminado a alcanzar un acuerdo entre ambas partes. Los pasados 4, 5 y 6 de mayo numerosos trabajadores y ciudadanos de la comarca salieron a la calle y se manifestaron para exigir más personal sanitario y mejores condiciones laborales. Protestas que tuvieron lugar por las calles de Dénia y en el propio hospital.

El presidente del comité de empresa ha apuntado que Marina Salud, que pertenece en su totalidad al grupo Ribera, “está viendo que si no hace mejoras se puede quedar sin sanitarios”. Según ha recalcado, es importante la fuga de profesionales a otros departamentos cercanos en los que las condiciones laborales son mucho mejores. Se han marchado a la Safor, la Marina Baixa o l'Alcoià, lo que augura un “verano complicado” en una comarca turística en la que crece de forma notable la población durante los meses estivales.

En ese sentido, Joan Sarrió ha señalado que la empresa ha dado un paso acertado para desatascar un problema que lleva mucho tiempo enquistado. Ahora le tocará mover ficha a los trabajadores. La intención es trabajar con los sindicatos para presentarle a Ribera una contraoferta lo antes posible.

Prevén tenerla lista y remitirla en los próximos días para que a la concesionaria le dé tiempo de estudiar esta nueva propuesta en la reunión que tienen programada para la próxima semana.

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