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Nicolás Van Looy
Benidorm
Martes, 29 de marzo 2022, 13:30
El leve retroceso registrado en los niveles de ocupación turística durante la pasada semana tiene su origen en una situación absolutamente coyuntural como es el temporal que azotó la Costa Blanca en esos días y que desanimó a una buena cantidad de visitantes, sobre todo durante el fin de semana, a visitar la costa mediterránea. Un pequeño tropiezo que, en cualquier caso, no empaña las buenas perspectivas del sector de cara a la ya inminente Semana Santa, primer gran examen del año que debe de sustanciar la recuperación definitiva tras la pandemia.
Así, el sector hotelero de la Comunitat Valencia calienta ya los motores para una de las citas turísticas más importantes del calendario. Este periodo vacacional por excelencia del calendario español y europeo se espera con «buenas perspectivas para el sector» tal y como ha explicado el presidente de Hosbec, Toni Mayor.
«Si se confirman las previsiones adelantadas de tiempo seco y soleado, se podrían alcanzar niveles de ocupación hotelera similares a los de 2019, última Semana Santa de la normalidad», afirmó el máximo responsable de la patronal hotelera.
Desde el sector alojativo se tiene muy presente que esta será la primera gran cita del turismo una vez que la pandemia ha pasado a una fase de estabilización y, «aunque el nivel de contagios permanece alto todavía, lo cierto es que ha bajado y mucho la presión del sistema sanitario que es lo verdaderamente preocupante».
Mayor ha indicado que «los consumidores españoles y europeos están en una nueva etapa de afrontar la pandemia y no se espera ninguna restricción ni cambios en la movilidad ni en los viajes que pueda afectar de nuevo al sector turístico». Aun así, el sector hotelero y del alojamiento turístico no baja la guardia y «se preparan ya los protocolos de actuación en base a las nuevas normas dictadas por el Ministerio de Sanidad para turistas que pudieran resultar positivos por Covid».
En esta reactivación turística, vuelve a ser fundamental el empuje que está teniendo el turismo internacional. Con una cuota de mercado que oscila entre el 55% en Benidorm, del 50% en Costa Blanca y Valencia y del 20% en Castellón, lo que lo va a convertir en «el factor diferencial que permita la consolidación de la recuperación».
En ese sentido, los datos indican que los británicos vuelven a ser líderes en el mercado internacional, con el 42,5% de cuota en Benidorm lo que confirma las buenas perspectivas al alza de la tendencia de este mercado.
Pese al mal tiempo, la ocupación hotelera durante la pasada semana alcanzó puntas durante el fin de semana de entre el 65% y el 70%, con buenas perspectivas ya de mejores datos para estas semanas previas en las que mejora sustancialmente la previsión meteorológica después de dos semanas de fenómenos adversos con lluvias intensas.
En ese sentido, el informe de actividad de Hosbec evidencia que el mal tiempo arrastrado desde la entrada de la borrasca Celia en la Comunitat Valenciana ha hecho mella en los últimos registros de ocupación de Benidorm.
Las cancelaciones de última hora provocaron una pérdida de 3,1 puntos porcentuales respecto a los datos de la semana anterior lo que situó a la capital turística en un índice del 66,5% de ocupación media.
En cuanto a la previsión para los últimos días del mes se espera un ligero repunte que podría elevar la ocupación hotelera de Benidorm en un notable 68,5%, aunque desde Hosbec afirman que ese registro podría verse superado si las condiciones climatológicas acompañan.
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