Los tiempos de la industria en Europa

Algunos 'entendidos' quieren que demos por muerta a la industria del automóvil europea, pero lo cierto es que en su mayoría tienen beneficios récord, a pesar de perder cuota de mercado y, por tanto, ventas en números de unidades. Esto se compensa vendiendo coches de mayor valor o, directamente, los mismos coches más caros, algo que nos preocupa más y que permitirá que muchas marcas entren en el mercado por este motivo.

Una de ellas es MG, que merece nuestro más unánime aplauso por saber leer lo que el público español y europeo quiere: coches económicos y atractivos, pero la batalla se llevará a cabo más arriba, en los segmentos eléctricos, que serán los únicos en sobrevivir en apenas diez años.

En esta tecnología, todos están rezagados con respecto a Tesla, pero Europa tiene su propio ritmo, y los fabricantes han movilizado toda su maquinaria de diseño, ingeniería, producción y comercialización hacia los coches eléctricos, y los resultados se verán cada vez más en el mercado. En este contexto Stellantis, que de entrada ha presentado su nuevo modelo, el Peugeot 3008 eléctrico, con una autonomía récord de 700 kilómetros, y eso siendo compatible con motores de gasolina e híbridos, todo un desafío de la ingeniería.

Veremos más ejemplos así: esperamos la llegada de los nuevos Citroën C3, Fiat Panda o Renault 5 eléctricos en 2024, con precios muy ajustados, y eso a pesar de que aún queda trasladar aquí la producción de baterías y el 'know-how' para fabricarlas. No digo que la industria europea vaya a ganar la batalla de los eléctricos, pero sí que va a pelear a fondo, y dará la batalla frente a Tesla, la industria china y cualquier otro fabricante externo, lo que redundará en mayor competencia y mejores precios.

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